El llamamiento de von der Leyen a utilizar activos congelados de Rusia para armar a Ucrania, el de Macron a reforzar la “economía de guerra” y enviar tropas de la OTAN a Ucrania, el de Trump a gastar más en defensa para los miembros de la alianza, y el del Comité de Inteligencia de Zelensky a redoblar la guerra de desinformación contra Rusia, muestran un compromiso con la militarización, en vez de la diplomacia.
En un artículo publicado por Oriental Review, Eric Zuesse considera que el llamamiento de Macron a reforzar la “economía de guerra” se alinea con la visión de Trump para la OTAN, haciendo hincapié en el aumento de las compras de armas, principalmente a EE.UU.
La coalición de 27 naciones se ha comprometido a gastar anualmente al menos el 2% de su PIB en el ejército. El plan de Macron refleja la estrategia de Trump, animando a los miembros de la OTAN a invertir en armamento para apoyar los objetivos de la alianza.
A pesar de la pretensión de prevenir la agresión de Rusia, las acciones propuestas, incluido el suministro de misiles, indican un compromiso con la militarización en lugar de resoluciones diplomáticas. La caracterización errónea del conflicto y la alineación con la visión de Trump subrayan la complejidad y las diferentes perspectivas de la respuesta internacional a la crisis de Ucrania, advierte Zuesse.
Por otro lado, la Unión Europea se está preparando para la guerra contra Rusia y está considerando utilizar los activos congelados de Rusia para comprar armas y municiones destinadas a Ucrania, según informó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Este enfoque representa un cambio significativo, ya que anteriormente se hablaba de utilizar esos fondos para la reconstrucción del país en general.
Mientras tanto, el 27 de febrero, el Comité de Inteligencia del Presidente Zelenskyy hizo un llamamiento desesperado a los aliados occidentales para que intensifiquen sus esfuerzos por suprimir los informes sobre el colapso de la guerra delegada de la OTAN contra Rusia a través de Ucrania, informó EIRNS.
La declaración dirigida a los ucranianos y a los socios internacionales,
subraya la necesidad de mejorar la resistencia conjunta y las medidas de seguridad, especialmente en el espacio de la información, para contrarrestar eficazmente tales informes.