En un articulo publicado por Declassified UK, Mark Curtis advierte cómo al ayudar a los ataques masivos de Israel contra los palestinos de Gaza, el Reino Unido está aplicando abiertamente un acuerdo firmado con la coalición de extrema derecha de Netanyahu en marzo de 2023 (poco más de seis meses antes de que estallara la guerra en la Franja de Gaza). El acuerdo ha sido ignorado casi por completo en los medios de comunicación nacionales británicos, y por consecuencia por toda la angloesfera y sus zonas de influencia, es decir, el Occidente colectivo.
Por José Luis Preciado
El acuerdo bilateral entre Gran Bretaña e Israel, denominado “Hoja de ruta 2030 para las relaciones bilaterales entre el Reino Unido e Israel” (2030 roadmap for UK-Israel bilateral relations), firmado el 21 de marzo del año pasado, fortaleció la cooperación en defensa y seguridad, comprometiéndose a enfrentar amenazas compartidas y tomar medidas contra grupos terroristas como Hamás y Hezbolá. Desde entonces, el Reino Unido ha apoyado militarmente a Israel durante su invasión de Gaza, con misiones de espionaje y formación de militares israelíes en el Reino Unido. Además, se ha descubierto que el ejército estadounidense ha suministrado armas a Israel utilizando una base británica en Chipre. Todo esto, aunque no ha sido ampliamente cubierto por los medios de comunicación del Reino Unido, está en línea con las promesas de la Hoja de Ruta. Además, recientemente, la RAF ha intervenido en defensa de Israel contra drones iraníes, en respuesta al ataque de Israel al consulado iraní en Damasco. La Hoja de Ruta también aborda la cooperación para contrarrestar la actividad desestabilizadora de Irán y prevenir que adquiera capacidades nucleares.
La Hoja de Ruta 2023 entre el Reino Unido e Israel va más allá de acuerdos anteriores, proclamando una alianza natural para defender a Israel a nivel mundial. Se centra en contrarrestar el antisemitismo y la deslegitimación de Israel en foros internacionales, pidiendo un escrutinio proporcionado. Los ministros británicos han respaldado esta postura, disculpándose por las acciones de Israel en Gaza y negándose a condenarlas. Además, el acuerdo busca reforzar la cooperación en la ONU y otros foros multilaterales, lo que se refleja en el apoyo del Reino Unido a Israel en resoluciones críticas sobre Gaza.
Una sección de la Hoja de Ruta asegura protección británica para Israel en organismos judiciales internacionales como el Tribunal Internacional de Justicia. Critica las remisiones de casos sobre el conflicto israelo-palestino a la CIJ, argumentando que socavan las negociaciones directas entre las partes. El gobierno británico, liderado por el subsecretario de Asuntos Exteriores, Andrew Mitchell, ha desestimado casos como el de genocidio presentado por Sudáfrica contra Israel, calificándolos de erróneos y provocativos.
En diciembre de 2020, el Reino Unido e Israel firmaron un acuerdo militar secreto, descubierto por Declassified UK a través de un tuit de las Fuerzas de Defensa de Israel. Aunque el gobierno británico nunca lo hizo público, se ha negado a revelarlo por razones de seguridad nacional. El ministro de Defensa, James Heappey, lo describió como una pieza clave de la diplomacia de defensa, pero su contenido ha sido escasamente detallado. Aunque se menciona raramente en los medios británicos, se sospecha que el acuerdo compromete al Reino Unido militarmente, posiblemente en relación con el apoyo a operaciones en Gaza. A pesar de críticas recientes del secretario de Defensa, Ben Wallace, sobre los ataques israelíes en Gaza, el gobierno británico niega ser cómplice de la violencia.
