La Organización Mundial de la Salud está preparando enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional de 2005 que le otorgarían un poder sin precedentes sobre los gobiernos nacionales, y anularían la soberanía nacional.
Por Children’s Health Defense
La Organización Mundial de la Salud (OMS) está preparando enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional de 2005, que “proporciona un marco jurídico general que define los derechos y obligaciones de los países en la gestión de sucesos y emergencias de salud pública que pueden traspasar fronteras”. Este acuerdo internacional jurídicamente vinculante otorgaría a la OMS un poder sin precedentes sobre los gobiernos nacionales, y anularía la soberanía nacional.
Las enmiendas propuestas también transferirán la gestión de la respuesta de salud pública de cada Estado durante todo lo que la OMS considere una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (ESPII). Si se aprueban, la(s) enmienda(s) cederá(n) al Director General (D-G) de la OMS la futura autoridad en emergencias de salud pública de EE.UU. y del mundo.
La Asamblea Mundial de la Salud (AMS), que es “el órgano decisorio de la OMS”, se reúne del 21 al 30 de mayo para debatir y, posiblemente, votar estas enmiendas.
A pesar de los catastróficos fracasos de la salud pública durante la pandemia de COVID-19, el gobierno federal bajo la actual administración ha indicado una fuerte voluntad de entregar lo que sólo puede percibirse como un poder de nivel dictatorial a la OMS a través del nuevo Reglamento Sanitario Internacional (RSI), que actualmente se está redactando a puerta cerrada – mostrando una total falta de transparencia.
Las enmiendas propuestas al RSI (acuerdo) consisten en:
- Eliminar el lenguaje existente del RSI que garantiza “el pleno respeto de la dignidad, los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas”. Intentan activamente eliminar “la dignidad, los derechos humanos y las libertades fundamentales” de las enmiendas al RSI.
- Cambiar las recomendaciones del RSI de “no vinculantes” a jurídicamente vinculantes, de modo que todos los países miembros deban obedecerlas y aplicarlas.
- Crear requisitos para los pasaportes digitales de vacunas que se utilizarán para restringir el acceso y los viajes como la OMS considere oportuno.
- Exigir la vigilancia de la información en línea y la supresión de la información considerada desinformación y desinformación.
- Imponer medidas de bloqueo extremas, incluida la creación de “cuarentenas de viajeros sospechosos, preferiblemente en instalaciones alejadas del punto de entrada”, también conocidas como “campos de cuarentena”, como se vio durante la pandemia de COVID-19 en China y en otros lugares.
- Permitir que el D-G de la OMS declare una emergencia a voluntad.
- Exigir a los países que utilicen determinados medicamentos y prohibir el uso de otros durante las emergencias.
- Permitir a la OMS requisar suministros médicos en cualquier país, transferirlos a otros países y eludir las leyes sobre propiedad intelectual.
Los dirigentes locales, estatales y federales deben alzar la voz y manifestar su oposición a este acaparamiento masivo de poder para evitar perder sus propias competencias en la gestión de emergencias de salud pública. La medicina global de talla única no permite una atención médica personalizada. Hacemos un llamamiento a nuestros representantes federales para que apoyen la H.R. 79 – Ley de Retirada de la OMS, para protegernos contra esta inminente toma masiva de poder a manos de la OMS. Pedimos a nuestros representantes estatales y locales que protejan a sus electores de las siguientes maneras:
- Preservar la autoridad de su estado para gestionar la salud pública.
- Evite que burócratas designados y no elegidos controlen las medidas de salud pública y la atención médica durante las emergencias de salud pública percibidas.
- Garantizar que ningún mandato médico pueda anular los derechos establecidos en las constituciones estatal y federal.
- Impedir la discriminación basada en decisiones médicas o sanitarias.
- Proteger los derechos de los pacientes al consentimiento informado para procedimientos médicos y para una atención individualizada.
- Prohibir la biovigilancia y la recogida de datos médicos y ADN sin el pleno consentimiento de la persona.
- Permitir que los profesionales sanitarios practiquen una medicina individualizada que no perjudique a los pacientes sin coacción por parte de organismos reguladores y otras influencias externas.
Nuestros funcionarios electos deben aferrarse a los poderes que les otorga la Constitución de EE.UU., y deben apoyar a sus electores que los eligieron para ocupar cargos. Nuestros representantes federales deben informarse sobre la HR 79 – Ley de Retirada de la OMS – para que puedan comprender mejor el riesgo que supone para la Soberanía Nacional seguir siendo un estado miembro de la OMS con los cambios pendientes en el reglamento del RSI.
Inste al Presidente a DETENER las negociaciones para las enmiendas propuestas al RSI con el fin de proteger la soberanía nacional y no entregar la autoridad de salud pública de nuestra nación a la OMS. Dígale que RECHACE la enmienda al Artículo 59, “Entrada en vigor; periodo para el rechazo o las reservas”, adoptada por la Asamblea Mundial de la Salud el 27 de mayo de 2022.
El pueblo estadounidense merece tener voz en estas importantes decisiones de salud pública que afectarán en gran medida a nuestro futuro, especialmente a la luz de los abismales fracasos de salud pública durante la COVID-19.
Qué puede hacer usted:
1. Rellene este formulario para:
· Decir a los legisladores de su estado que expresen su oposición y protejan a su estado de la posible nueva propuesta de Reglamento Sanitario Internacional que pondría todo el poder de la salud pública en manos del D-G de la OMS.
· Decir al Congreso que apoye la HR 79, Ley de Retirada de la OMS, para preservar la soberanía nacional.
· Decir al Presidente Biden que DETENGA las negociaciones para las enmiendas propuestas al RSI y haga retroceder las enmiendas al RSI que fueron cambiadas apresuradamente en 2022.
2. Firme la Declaración de Derechos para un futuro libre de tiranía. Una vez que haya firmado, comparta la Declaración de Derechos en las redes sociales, comparta cualquier acción que esté llevando a cabo para elegir la libertad y preservar sus derechos y etiquete su publicación con #TheGreatFreeset.
3. Comparte esta página con tu familia, amigos y en las redes sociales para concienciar y animar a la gente a actuar.
Por favor, ayúdanos difundiendo esta información entre el mayor número de personas posible.
Fuente:
Children’s Health Defense: Stop the WHO Power Grab!