Conforme las tensiones geopolíticas se mueven hacia Polonia y Bielorrusia, la embajadora estadounidense ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, advirtió que cualquier ataque del Grupo Wagner de Rusia contra la OTAN sería tratado como un ataque de Rusia, informa The Eurasian Times.
Las adquisiciones de armamento por parte de Polonia, incluidos los lanzadores HIMARS y un reciente acuerdo armamentístico con Corea del Sur, contribuyen a la escalada de tensiones.
El Presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, discutió con el Presidente ruso, Vladimir Putin, los supuestos planes polacos para adquirir partes occidentales de Ucrania, y las autoridades rusas sospechan de la implicación de Polonia en la desestabilización de la región.
Putin prometió defender a Bielorrusia de cualquier agresión, pero mantuvo la incertidumbre sobre Ucrania. La situación se deriva de la derrota y las importantes pérdidas de Kiev, lo que lleva a cuestionar el apoyo occidental y la escalada del conflicto en la región.
El nuevo plan de Londres y Washington: Unir a Ucrania y Polonia en una Commonwealth