En un artículo publicado por Declassified UK, los periodistas Mark Curtis y John McEvoy llaman la atención sobre los posibles conflictos de intereses del magistrado Jeremy Johnson, uno de los jueces del Tribunal Superior de Justicia que decidirá la suerte del fundador de WikiLeaks junto a la polémica jueza Dame Victoria Sharp, una aristócrata cuya familia forma parte del establishment ultraglobalista.
Los autores revelaron que Johnson representó al Servicio Secreto de Inteligencia del Reino Unido (MI6) y al Ministerio de Defensa, habiendo recibido autorización de seguridad para acceder a información de alto secreto. El artículo hace hincapié en la historia de Assange de exponer secretos de los establishments de seguridad de EE.UU. y el Reino Unido, yuxtapuesto contra un juez que ha trabajado y recibido pagos de las mismas agencias estatales involucradas en la persecución de Assange. El artículo analiza además la implicación legal de Johnson con el MI6 durante las pesquisas de la princesa Diana, representando al Ministerio de Defensa en casos de alto perfil, y sirviendo como abogado especial en tribunales cerrados, planteando preguntas sobre conflictos de intereses institucionales en el caso de Assange.
Johnson se sentará con la baronesa Dame Victoria Sharp, su juez superior, para decidir el destino del cofundador de WikiLeaks. Si es extraditado, Assange se enfrenta a una pena máxima de 175 años.
La vida de Julian Assange está en manos de la jueza británica Dame Victoria Sharp