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Cómo las élites anglo-estadounidenses promueven la alienación disfrazada de progresismo para acondicionar a las masas a su agenda de transhumanismo y orden a través del caos

[Nota del Editor: El transhumanismo implosiona con la implantación de tecnología en el cuerpo humano para convertirlo en cyborg posthumano. Sin embargo, la fase de acondicionamiento pre-transhumanista inició con la programación mental, la ingeniería social y la manipulación a través de la cultura de masas que forman parte de un proceso histórico degenerativo y antihumanista de larga duración que poco tiene que ver con la izquierda o con el socialismo (como la oposición controlada quiere hacerle creer a la gente), y que está vinculado a la agenda cabalista que es impulsada por las élites maltusianas del nuevo imperio anglo-veneciano —Londres, WallStreet, Vaticano— y sus centros de programación mental e ingeniería social.

Según el historiador revisionista, Dr. Michael Hoffman, “Una de las ironías más profundas en la historia de las sociedades secretas occidentales es que la inteligencia artificial se originó en el siglo XXI con el concepto hermético y cabalístico del animismo (ensouling) de las estatuas, una doctrina alimentada por la tradición mágica renacentista del papado.” [1] Según el Dr. Hoffman, esta “teología ocultista del infierno comenzó a gobernar Roma después de 1450.”

La situación actual es que la mayoría de los estadounidenses, y los habitantes de naciones influidas por la cultura anglosajona, no tienen ni idea de lo lejos que Estados Unidos ha llegado en lo que se refiere a la alienación, degeneración y decadencia social que están siendo estratégicamente normalizadas a través del gobierno, las instituciones religiosas, la industria del entretenimiento y la corporatocracia en general.

A continuación, en dos artículos distintos, Paul Craig Roberts y Robert Bridge, coinciden al advertir que antes de que los estadounidenses puedan hablar de “valores democráticos”, deberían encontrar la manera de frenar a los destructores de los valores familiares y humanistas que los están aniquilando culturalmente.]

 

 

Robert Bridge: El corporativismo estadounidense promueve la pedofilia en nombre de los ‘estilos de vida alternativos’

Las empresas que cuentan con niños entre su público objetivo, como Kellogg’s y Lego, se han subido al carro del “orgullo” del mes de junio, impulsando controvertidos planes de marketing en un grupo demográfico que merece ser protegido de temas tan maduros.

Hoy en día, ni siquiera el acto mundano de sentarse a desayunar un tazón de cereal frío está libre de algún tipo de mensaje político. De hecho, se recomienda encarecidamente la discreción de los padres en lo que respecta a la salud mental de nuestros hijos.

Esto se hizo evidente cuando la empresa Kellogg lanzó su campaña “Juntos con el orgullo” cuando las cajas de cereales de edición limitada llegaron a las estanterías de las tiendas de todo el país el 1 de junio, marcando la última colaboración de la empresa con GLAAD (Alianza de Gays y Lesbianas contra la Difamación).

“Los iconos LGBTQ+ y los amigos de GLAAD comenzarán su día con los nuevos cereales para celebrar que, independientemente de quién seas o a quién ames, eres demasiado increíble para caber en una caja (de cereales)”, decía el mensaje.

Continuaba diciendo que una parte de los beneficios obtenidos por cada caja de cereales vendida se destinará a “acelerar la aceptación y avanzar en la igualdad de la comunidad LGBTQ+”, un mensaje que parece estar en contradicción directa con la declaración de la misión de Kellogg, “Alimentar a las familias para que puedan florecer y prosperar”.

 

 

En la portada de la nueva caja de cereales de Kellogg’s aparecen todas esas adorables mascotas corporativas de la obesidad y la diabetes que todos los estadounidenses conocen, como el tigre Toño, la rana Dig’em y los duendes de Rice Krispy. En el lateral de la caja, aparece el tucán Sam, la mascota de Froot Loops, indicando a los niños prepúberes que rellenen los espacios en blanco previstos con sus propios pronombres especiales. Llegados a este punto, algunos se preguntarán qué ha pasado con los antiguos anillos decodificadores y otros trucos de marketing dirigidos a los jóvenes.

Esta campaña corporativa gratuita que promueve estilos de vida sexuales, dirigida directamente a los jóvenes e impresionables, no termina aquí. En vísperas de junio, Lego, la empresa con sede en Dinamarca, jugó con la idea de la homosexualidad y la transexualidad en su lanzamiento “Todo el mundo es increíble”, una colección de 346 piezas que incluye un escenario con los colores del arco iris para 11 figuras monocromáticas anodinas.

Matthew Ashton, vicepresidente de diseño de Lego, explicó el significado que hay detrás de cada color de las figuras. Los colores negro y marrón “representan la amplia diversidad de todos dentro de la comunidad LGBTQIA+”, dijo. Los colores azul pálido, blanco y rosa pretenden “apoyar y abrazar también a la comunidad [transgénero]”.

“Puse a propósito la drag queen morada como un claro guiño al lado fabuloso de la comunidad LGBTQIA+”, dijo.

La alusión era a un nuevo y extraño evento social que se celebra en las bibliotecas públicas de todo el país, financiadas por los contribuyentes, en el que drag queens leen a los niños -muchos de ellos no mayores de cuatro y cinco años- historias cargadas de ideas e insinuaciones sexuales.

Y como casi todos los eventos o actividades promovidos por la comunidad LGBTQ+ y dirigidos a los niños, ha habido muy poca reacción, al menos por parte de los medios de comunicación. Aunque muchos de los niños expuestos a estos temas tan maduros aún no tienen la edad suficiente para atarse los zapatos, de alguna manera se ha puesto de moda sembrar sus jóvenes mentes con temas que están totalmente fuera de su comprensión.

Pensemos, por ejemplo, en el niño-estrella de “género fluido” Desmond Napoles, cuyo nombre artístico es “Desmond is Amazing”, que empezó a actuar como el primer “drag kid” de Estados Unidos a la tierna edad de 10 años. Aunque se podría pensar que los medios de comunicación serían prudentes e incluso alarmistas a la hora de informar sobre este niño, del que muchos dicen que sufre abusos, la información sobre Desmond ha sido muy halagadora, aduladora y francamente promocional. ¿No lo creen? Vea la forma en que el programa Good Morning America de la cadena ABC se deshizo en elogios hacia la cabeza de Desmond.

 

 

Extrañamente, estos ejemplos de explotación abierta de niños siguen ocurriendo, a pesar de que la respuesta pública a estas historias ha sido de repulsión, simpatía e incluso ira. El mencionado clip de Good Morning America, por ejemplo, obtuvo más de un millón de visitas en YouTube, mientras que generó más de 65 mil votos negativos en comparación con 3,9 mil likes. Las empresas estadounidenses reciben la misma respuesta negativa cada vez que intentan sacar provecho de la señalización de la virtud.

En 2019, Coca-Cola, por ejemplo, la misma corporación que recientemente aleccionó a sus empleados a “ser menos blancos”, lanzó un comercial de Sprite que celebraba el estilo de vida transexual de los jóvenes. La reacción fue ensordecedora. Lo mismo ocurrió cuando Gillette aleccionó a su público objetivo sobre los peligros de la “masculinidad tóxica”.

Así que aquí tenemos, en un extremo del espectro corporativo, empresas y medios de comunicación que celebran el estilo de vida depravado de un “drag kid” que actúa en clubes nocturnos, mientras que en el otro extremo advierten sobre los hombres que exhiben demasiada masculinidad. Realmente hace que uno se pregunte qué demonios está pasando en la sala de juntas de las empresas. ¿Estas campañas corporativas se organizan realmente con la vista puesta en los resultados, o se trata más bien de un programa para insensibilizar a la sociedad sobre los males de la pedofilia? Incluso si la respuesta es no, esa es la desafortunada percepción que se está fomentando.

El dilema llega a la fase crítica cuando se considera el escaso recurso que el consumidor medio y los grupos de ciudadanos tienen contra las corporaciones gigantescas, que, debido a su gran tamaño y a sus poderes monopolísticos, son prácticamente inmunes a los esfuerzos organizados para castigarlas, como los boicots y las campañas de petición. Sin embargo, hay que hacer algo para detener la hipersexualización de nuestra juventud patrocinada por las empresas.

Antes de que los estadounidenses puedan hablar de “valores democráticos” con la cara seria, deben encontrar formas legítimas de frenar a estos destructores corporativos de los valores familiares de una vez por todas. Aunque es casi imposible impedir que las empresas se dirijan a los jóvenes con su omnipresente publicidad, la línea se ha cruzado cuando la publicidad intenta vender estilos de vida alternativos a los niños, que son demasiado jóvenes para entender el “producto” que se promociona. Eso, en pocas palabras, es una forma de pedofilia que debe ser condenada desde todos los rincones de una sociedad respetable.

 

 

Paul Craig Roberts: La inseguridad destruyó a Estados Unidos

La mayoría de los estadounidenses no tienen ni idea de lo lejos que ha ido su país. No sólo tenemos al régimen de Biden anunciando su solidaridad con BLM y ondeando la bandera de BLM en las embajadas y misiones consulares de EE.UU., vídeos de reclutamiento militar de EE.UU. que hacen hincapié en el reclutamiento de mujeres lesbianas, hombres que se visten como mujeres y estadounidenses que se extirpan los genitales para convertirse en “sin género”, sino que también tenemos sistemas escolares demócratas que enseñan a los blancos a odiarse a sí mismos y les infundan sentimientos de culpa hasta convertirlos en agentes eficaces para la reconstrucción de Estados Unidos como un sistema de racial de castas que favorece a los negros.

En la edición de primavera de 2021 de City Journal, publicado por el Manhattan Institute, Christopher F. Rufo documenta con sus propias palabras y hechos cómo el sistema escolar público de Oregón ha abandonado la educación por el adoctrinamiento de la secta.

Rufo se centra en los sistemas escolares de Tigard-Tualatin, Beaverton y Portland, donde los estadounidenses blancos representan el 98-99% de la población. Utilizando sus propios documentos y declaraciones oficiales, muestra que el propósito de los burócratas de la educación es destruir la confianza de los estudiantes blancos e infundirles “culpa blanca”, “vergüenza blanca” y autodesprecio. Se institucionaliza un código de discurso de odio, cuyo propósito es “patologizar cualquier oposición política al nuevo orden”. La causa de la opresión es la “blancura” y los valores blancos de daltonismo, individualismo y meritocracia.

En lugar del avance por mérito, debe haber un avance basado en la “equidad”, lo que significa resultados que favorecen a los negros independientemente del mérito. El daltonismo se denuncia como un truco de los blancos para mantener un sistema basado en el mérito. El individualismo debe ser sustituido por el pensamiento de grupo descrito por Mark Zuckerberg de Facebook como su ideal donde todos cumplen con el pensamiento de grupo controlado por él y un puñado de oligarcas del “nuevo orden”.

El Proyecto 1619 del New York Times ha aliado a los medios de comunicación estadounidenses con el ataque a la Constitución de los Estados Unidos. Según el New York Times y el sistema de escuelas públicas de Oregón, la Constitución es un documento racista escrito con el único propósito de institucionalizar la esclavitud de los negros en la fundación del estado americano.

Como observa Rufo, “hemos llegado a la extraña realidad en la que el Estado, a través de los órganos de la educación, agita su propia destrucción. Los educadores han condenado toda la estructura del orden social y han celebrado a los que la derriban”.

Está claro que los liberales blancos han conseguido destruir la creencia de muchos estadounidenses en el Estado de Derecho y la Constitución denunciando estos logros históricos como “herramientas de la supremacía blanca”.

Algunos estados rojos han aprobado leyes que prohíben la enseñanza de la demonización de los americanos blancos en sus estados. Lo que es probable que ocurra es que los prostitutos de la comunicación, los intelectuales y el Departamento de Justicia de EE.UU., que es antiblanco, derroquen las leyes estatales como una forma de macartismo que prohíbe la libertad de expresión.

En otras palabras, la libertad de expresión se limita a la denuncia de los valores fundacionales de Estados Unidos como supremacistas blancos y de los estadounidenses blancos como “opresores racistas sistemáticos”.

Hoy los estados están desunidos entre azules y rojos en mucha mayor medida que en 1860. Hoy hay dos países que ocupan la misma ubicación geográfica. Uno, los estados rojos, cree en Estados Unidos y en sus documentos fundacionales. El otro, los estados azules, creen que América personifica el mal de la supremacía blanca.

El mensaje es claro. Desde los demócratas el mensaje es que los americanos blancos deben someterse a los negros a los que han perjudicado. Desde los Estados rojos la respuesta es que los blancos liberaron a los negros de la esclavitud a la que les vendieron sus hermanos negros, los blancos aprobaron la Ley de Derechos Civiles de 1964 y la 14ª Enmienda de la Constitución de EEUU que garantiza a los negros la igualdad ante la ley. La afirmación de que los americanos blancos negaron estas protecciones a los negros es una mentira de los traidores culpables de traición que pretenden derrocar a los Estados Unidos de América.

La única salida es la guerra civil. Aprenderemos si los estados rojos tienen suficiente confianza y voluntad para defender los derechos constitucionales de los americanos blancos.

De lo contrario, tendremos, como se predijo hace algunos años, una “mayoría desposeída”. Los estadounidenses blancos podrían ser desposeídos no sólo de sus derechos legales y constitucionales, sino también de sus vidas.

 

Notas

[1] Michael Hoffman / Revisionist History — A Prequel to The Occult Renaissance Church of Rome; traducido al español por Mente Alternativa: La teología ocultista del infierno comenzó a gobernar Roma después de 1450.

 

Historia Revisionista: La teología ocultista del infierno comenzó a gobernar Roma después de 1450

 

Fuentes:

Robert Bridge: Corporate America Prostituting Itself to Children on Behalf of ‘Alternative Lifestyles’ Promotes Pedophilia; en Strategic Culture Foundation, 26 de mayo de 2021.

Paul Craig Roberts: Insouciance Destroyed America; en Lew Rockwell, 27 de mayo de 2021.

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