Anglófilos buscan guerra nuclear al esparcir la mentira de que China infectó intencionalmente a Occidente. Los ciudadanos del mundo, en particular en el sector del transatlántico, se han visto inundados de repente con una andanada de cuentos histéricos contra China, a través de los medios de comunicación y noticieros de falsedades, grupos de peritos y cabilderos (generalmente anglófilos), blogs, comentaristas, y congresistas estadounidenses y europeos. Abundan las teorías conspirativas, como la del cuento que acusa a China de haber desatado intencionalmente el coronavirus sobre su propio pueblo para luego desplegar a los infectados hacia las naciones occidentales, con el propósito de tumbar las economías occidentales, como han estado despotricando los comentaristas de la cadena de TV Fox News hasta el cansancio. La Sociedad Henry Jackson de Londres (que no es más que una fachada del servicio secreto de la reina británica, el MI6) formado por puros extremistas fanáticos neoconservadores de hueso colorado, tanto de Estados Unidos como del Reino Unido, ha sido una de las entidades que han iniciado varias de esas calumnias y mentiras descaradas, las cuales luego muy comedidamente han sido reproducidos por los medios de la prensa corporativa de Europa y Estados Unidos, que ahora declaran que China es responsable penalmente por la pandemia, y que se le tiene que hacer que “rinda cuentas”.
Esparcir las mentiras de que China infectó intencionalmente al Occidente es pedir una guerra nuclear
Toda esta campaña dejó ver su intención claramente esta semana cuando las viejas potencias coloniales de Europa, encabezadas por el imperio británico y los franceses, lanzaron la propuesta de crear una “OTAN Indo-Pacífico”, a la que le llamarían “Organización del Tratado Indo-Pacífico”, y que sería una nueva entidad para “preservar la región del revisionismo autoritario, luego de que el crecimiento militar y económico de China… plantea un desafío a las potencias democráticas”. Y en consecuencia, afirman, es necesaria la confrontación militar con China.
Como lo destaca el título del boletín de prensa que publicó el Instituto Schiller esta semana, “La histeria contra China es muy peligrosa, y muy estúpida”. El vocero del Instituto Schiller, Dennis Speed, lo planteó de una manera personal para todos el jueves 16: “Lo que quiero señalar es que, si tú crees que los chinos desplegaron conscientemente un arma biológica contra Estados Unidos para derribar a Occidente; si tú dices eso, entonces lo que dices es que los chinos iniciaron una guerra contra Estados Unidos. Si realmente es eso lo que dices, solo se puede sacar una conclusión posible de lo que dices: que Estados unidos tiene que lanzar una guerra contra China. Porque entonces dirías que los chinos, conscientemente y con toda malicia premeditada, quisieron matar más estadounidenses de los que murieron en el 11-S. Y lo que estás pidiendo, ya sea que lo quieras decir o no, es una guerra termonuclear. Tienes que considerar si estás ó no preparado para aceptar las consecuencias de andar repitiendo esas declaraciones, porque eso es lo que estás pidiendo”.
La enorme campaña contra China que la editorial de EIR expuso en el folleto “A acabar con la cacería de brujas macarthista con China y el Presidente Trump” tiene el mismo propósito que la farsa del Rusiagate, a saber, impedir al Presidente Trump que logre su propósito declarado de establecer relaciones de amistad con Rusia y con China.
¿Cuáles son las consecuencias de sabotear la relación entre el Presidente Trump, Putin y Xi Jinping? Speed abordó eso también: “El propósito de todo esto es crear las circunstancias en las que mueran decenas de millones de personas en el continente africano y en el subcontinente indio, y en Sudamérica… matar a decenas de millones de personas en este planeta; porque la única potencia que podría intervenir a tiempo para evitar que eso ocurra debido al coronavirus, dado el estado de la atención médica en África, en Sudamérica, en el subcontinente indio, para intervenir a tiempo para detener esa cantidad de muertes de decenas de millones de personas, sería una combinación de Estados Unidos, China y Rusia. Otras naciones sería importante que participaran, como Japón; hay varias naciones europeas que serían de importancia también. Pero a menos que se junten Estados Unidos, Rusia y China, esas vidas no se pueden salvar”.
Speed se dirigió a cada ciudadano en lo personal: “No puedes correr el riesgo de que eso no ocurrirá. Significa que tienes que hacer una movilización comparable a lo que vimos durante la Segunda Guerra Mundial. Tienes que dejar todo, igual como se hizo el 7 de diciembre de 1941, para hacer una movilización de las fuerzas productivas de esas tres naciones y de todas las demás naciones, para crear, como de un día para otro, una plataforma mundial para la atención médica, con agua limpia, buena comida, hospitales, transporte bueno, para poder mover por todas partes al personal médico y el equipo. Y esto se va a tener que hacer volviendo a emplear a decenas de millones de estadounidenses y muchas otras personas en todo el mundo. Si no haces esto, puedes crear una circunstancia similar a la de la plaga bubónica de 1347, en donde murió una de cada tres personas en Europa. Esa es la perspectiva para tu futuro inmediato”.
Para abordar esta realidad aterradora de la crisis mundial de hoy, y para llegar a la solución necesaria, el Instituto Schiller va a realizar una conferencia internacional por Internet el 25y 26 de abril, y todos los seres humanos de buena voluntad están invitados a unirse a esta tarea histórica. Puedes aceptar esta invitación y este desafío en: https://schillerinstitute.nationbuilder.com/20200425_national_conference.
Se intensifican los tambores de guerra en Estados Unidos contra China
Los funcionarios de inteligencia (retirados) estadounidenses, coronel Pat Lang y Larry Johnson, ahora están repitiendo la desquiciada imputación de que el gobierno chino desató el coronavirus novel contra su propia nación, con el fin de lanzarla como guerra biológica contra el Occidente.
Es evidente que a ambos los están alimentando con informes falso provenientes de la misma “comunidad de inteligencia” que desató el fraude del “Rusiagate” que ellos mismos denunciaron y atacaron. Si la acusación del uso de un “arma biológica” que ahora están repitiendo se convierte en política oficial, constituiría prácticamente una declaración de guerra contra la nación más poblada de la Tierra, una China con armas nucleares.
Durante las semanas anteriores, ambos le habían restado importancia al peligro del coronavirus y la necesidad de tomar medidas de cuarentena. Ahora suenan como esas criaturas de las que se apodera algún extraterrestre malvado en las películas de invasores extraterrestres.
Lang anunció el 14 de abril que su blog “Sic Semper Tyrannis” iba a promover el cuento de la guerra biológica de China.
“Yo considero ahora que el PCC (Partido Comunista de China) y el gobierno chino son enemigos de Estados Unidos que están empeñados en una guerra no declarada contra Estados Unidos. La pandemia actual es solo uno de los teatros de esa guerra. Es patente que el PCC ha procurado alimentar la creación y el desarrollo del virus de la COVID-19. Para ese fin utilizaron su dinero para infiltrar las instalaciones de investigación estadounidenses y canadienses para mejorar sus capacidades en sus centros de investigación. Algunos estadounidenses en su adoración al dinero por encima de todo han ayudado a esa infiltración. Ahora recibimos muchos ataques troles de ‘amigos’ de China. Algunos de ellos son europeos. Esto es triste porque para el PCC los europeos son solo un inconveniente cuyos intereses son ‘daño colateral’ ”.
El ex analista de la CIA, Larry Johnson, en altas horas de la madrugada del 13 de abril, publicó en el blog de Lang una perorata contra China propia del más desquiciado orate geopolítico británico. Decía que se proponía denunciar “la simple, terrible verdad, la propagación global del Corona 19 fue un acto consciente y deliberado del gobierno comunista chino para debilitar a Occidente, en especial a Estados Unidos”. Luego sale con un “conjunto creciente de evidencia de que el lanzamiento de la Corona desde Wuhan no fue a consecuencia de comer murciélagos podridos o algún accidente en el nivel 4 del laboratorio de biología de Wuhan. En vez de reclutar fanáticos suicidas armados de cinturones con bombas, el gobierno chino parece haber decidido infectar a sus ciudadanos y enviarlos a los grandes centros de población de Occidente. Fue un plan consciente para infectar y debilitar al Occidente”.
Termina con esta gema retórica desquiciada: “Guste o no, estamos en guerra con China. China no es nuestro amigo. Es un adversario listo a destruir con el sitial de Estados Unidos como líder económico del mundo… ¿Vamos a hacer algo o marcharemos tranquilamente hacia la tumba de la historia?”.
Pompeo y la comunidad de inteligencia intensifica la guerra contra China
La cadena de televisión Fox News publicó el miércoles 15, con bombo y platillo, el cuento de que “múltiples fuentes” en Estados Unidos creen “cada vez más confianza”, que la pandemia del coronavirus es “probable” que se originó en el Laboratorio de Virología de Wuhan en China. Según las “fuentes” de Foz, que no se desarrolló “como un arma biológica, sino como parte del propósito de China de demostrar que sus esfuerzos para identificar y combatir el virus son igual o superiores a las capacidades de Estados Unidos”. Luego subrayan que “no es definitivo” y dicen que otros individuos en el gobierno son escépticos al respecto.
El cuento de Fox es muy parecido al cuento británico de que “los rusos envenenaron a los Skripal” en marzo de 2018, todo como chismes, insinuaciones, sin ninguna prueba. Esto no es coincidencia; el 5 de abril plantaron en el tabloide británico Daily Mail, la versión del “laboratorio de Wuhan” y ahí empezó la campaña a circular en el resto del mundo. Como es costumbre, empiezan con el cuento de que “fuentes de muy alto nivel en el gobierno británico dicen que, a pesar de que ‘los asesores científicos en general’ opinan todavía que el virus letal se transmitió primero a los humanos a través del mercado de animales vivos de Wuhan, ‘ya no se da por descontado’ que se trata de un accidente de un laboratorio en la ciudad china”.
Fox empezó con el cuento en coordinación evidente con el Departamento de Estado de Mike Pompeo. Según lo reportó Fox, el diario Washington Post había publicado el día anterior cables diplomáticos de enero de 2018 que los había filtrado el Departamento de Estado y en donde dicen que la seguridad en el Instituto de Virología de Wuhan era muy endeble.
Al periodista de Fox, John Roberts, se le unieron otros periodistas que cubren el informe diario del Grupo Especial de la Casa Blanca sobre el coronavirus, y trataron de utilizar el cuento para hacer que el Presidente Trump rompiera con el Presidente Xi Jinping. Roberts le preguntó sobre el cuento de Fox, y Trump le interrumpió: “más y más, ya hemos oído el cuento… pero estamos haciendo un examen muy a fondo de esta terrible situación que sucedió”.
Luego la siguiente pregunta: ¿El Departamento de Estado ha planteado sus preocupaciones sobre la endeble seguridad “en sus muchas conversaciones con el Presidente Xi, señor Presidente?”. Trump respondió: “No quiero hablar lo que hablamos sobre el laboratorio. Simplemente no quiero discutirlo. No es apropiado en este momento”.
Luego Pompeo le dijo a Martha MacCallum de Fox News esa noche que “lo que sí sabemos es que este virus se originó en Wuhan, China. Sabemos que hay un Instituto de Virología en Wuhan, a unas cuantas millas de donde se ubica el mercado de animales vivos… Ya debes saber que el gobierno de Estados Unidos trabaja diligentemente para averiguar esto”.
MacCallum: “Entonces, ¿cómo es que esto no tiene un impacto muy negativo, de mucho peso en nuestras relaciones con China?”
Pompeo decidió esquivar la pregunta, y dijo que ha estado conversando con “mis homólogos en todo el mundo en los últimos días” sobre la cuestión de que China “se le tiene que hacer responsable” a China por no compartir la información a tiempo, porque eso “puso en riesgo a la gente de todo el mundo”.
Las medidas soberanas que adoptan China y Rusia, asustan al partido anglófilo de la guerra en EU
Todas las medidas que toman china y Rusia en el marco del nuevo paradigma que se tiene que crear para garantizar la supervivencia de la humanidad en medio de esta crisis global, genera una reacción de miedo en el partido anglófilo de la guerra en Estados Unidos, y quieren contrarrestar esas medidas tratando de echarles la culpa de algo. La concentración militar de Estados Unidos en el océano Pacífico en contra de China y la estrategia de “enfoque láser” de la OTAN en contra de Rusia, son dos ejemplos de esto.
En Congreso de Estados Unidos, el representante Mac Thornberry, el republicano de mayor rango en la Comisión de Servicios Armadas de la Cámara, introdujo una propuesta para crear un fondo especial dedicado a “disuadir” a China, con un monto inicial de $6 mil millones de dólares. Según la reseña al respecto en la revista Foreign Policy, la propuesta de Thornberry refleja la histeria creciente entre los representantes de ambos partidos para que se adopte una solución más inmediata y convencional para enfrentar la supuesta amenaza de China, y se trata de crear el programa de Washington denominado Iniciativa Europea de Disuasión, un fondo especial dedicado a operaciones de diverso tipo contra Rusia. Según la reseña de la revista, la idea de crear es fondo llamado Iniciativa de Disuasión Indo-Pacífica, tiene apoyo bipartidista, no solo de los halcones belicistas como el senador Josh Hawley y ultraderechistas fanáticos como el presidente de la Comisión de Servicios Armados del senado, el senador republicano Jim Inhofe, y también del presidente de la Comisión de Servicios Armados de la Cámara, el representante republicano Adam Smith, del estado de Wasghington.
Al mismo tiempo, la OTAN siguen enfocada en su campaña contra Rusia, a pesar de la pandemia del coronavirus. “Como comandante del Comando de Operaciones Aliadas en representación de la OTAN, nosotros y nuestros comandantes seguimos enfocados como láser en preservar nuestras capacidades para disuadir y defendernos adecuadamente en Europa”, le dijo el comandante de la OTAN , general Tod Wolters, a la prensa antier durante una rueda de prensa organizada por el centro de prensa del Departamento de Estado de EU en Bruselas, Bélgica. Luego salió con la cantaleta de la “influencia maligna” rusa. “Hemos visto también casos en donde Rusia le ha enviado bienes a naciones europeas, y ha habido muchos informes de la prensa libre que indican que esos bienes están dañados”, dijo Wolters. En particular, se refirió a la ayuda a Italia y agregó que “yo sigo muy, pero muy concentrado en esas transacciones. Le pongo mucha atención a la influencia maligna rusa”.
Guerra contra Xi Jinping y Trump inspirada por los británicos
Fuentes:
LaRouche — Esparcir las mentiras de que China infectó intencionalmente al Occidente es pedir una guerra nuclear.
LaRouche — Las medidas soberanas que adoptan China y Rusia, asustan al partido anglófilo de la guerra en EU.
LaRouche — Pompeo y la comunidad de inteligencia intensifica la guerra contra China.
LaRouche — Se intensifican los tambores de guerra en Estados Unidos contra China.
