Un estudio reciente advierte que los insectos comestibles pueden ser el vector de parásitos más importante para los animales insectívoros domésticos. Ante la iniciativa de la Unión Europea para regular la introducción de los insectos como “nuevos alimentos” y con el Pentágono desarrollando insectos modificados genéticamente, un grupo de científicos se preguntan si estos podrían llegar a ser utilizados para la guerra biológica más que para el uso agrícola de rutina.
