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Twitter elimina decenas de cuentas rusas por ‘socavar la fe en la OTAN’

Las redes de propaganda del orden totalitario unipolar siguen eliminando las voces de quienes buscan un orden multipolar abierto. Desde luego, un sistema de propaganda es mucho más eficaz —y peligroso— cuando los que están dentro no son conscientes de él y se creen libres de influencia.

 

Por Alan Macleod

El gigante de las redes sociales Twitter anunció [https://blog.twitter.com/en\_us/topics/company/2021/disclosing-networks-of-state-linked-information-operations-.html] [el 23 de febrero] que ha eliminado 373 cuentas que, según afirma, estaban vinculadas a Rusia, Irán y Armenia. En una entrada de su blog titulada “Revelación de redes de operaciones de información vinculadas al Estado”, afirmó que había tomado la decisión de eliminar 69 cuentas rusas principalmente porque estaban “socavando la fe en la alianza de la OTAN y su estabilidad”. La medida desató la controversia en el propio Twitter, con muchos usuarios bromeando que su propia lealtad a la OTAN no era lo suficientemente celosa.

 

La casa de cristal de Twitter

Twitter justificó la decisión señalando sus normas relativas a la prohibición de las redes de desinformación controladas por el Estado. Sin embargo, no explicó exactamente cómo sabía que estos usuarios estaban a sueldo del Kremlin o bajo el control del Gran Ayatolá Jamenei. De hecho, el equipo supuestamente “independiente de investigación y análisis” del Observatorio de Internet de Stanford, al que Twitter contrató su trabajo, tiene en sí mismo conexiones preocupantes con el Estado (estadounidense). Por ejemplo, su miembro no residente Matt Masterton era, hasta hace poco, un alto funcionario del Departamento de Seguridad Nacional. De hecho, todo el observatorio se encuentra dentro del Instituto Freeman Spogli de Estudios Internacionales, dirigido por el ex embajador estadounidense en Rusia (y destacado halcón del Kremlin) Michael McFaul.

Los supuestos “expertos” acusan a los usuarios de ser agentes de desinformación vinculados a Rusia con gran regularidad. Ben Nimmo, periodista de datos y antiguo jefe de prensa de la OTAN, afirmó falsamente que un destacado concertista ucraniano y un jubilado galés eran bots del Kremlin. Nimmo fue anunciado recientemente como jefe de inteligencia de Facebook.

No es ni mucho menos la primera vez que Twitter toma medidas contra quienes difunden información que no le gusta. Sin embargo, sus objetivos parecen ser invariablemente los enemigos de Estados Unidos y la OTAN. En junio, siguiendo el consejo del Instituto Australiano de Política Estratégica (ASPI), Twitter prohibió casi 200.000 cuentas de China, Rusia y Turquía, a las que acusó de “difundir narrativas geopolíticas favorables al Partido Comunista de China”, el Kremlin o Estambul. Sin embargo, la propia ASPI está financiada por los gobiernos de Estados Unidos y Australia, así como por una miríada de contratistas de armas, todos los cuales tienen un claro y fuerte interés en aumentar las tensiones con los adversarios de la OTAN. Cuatro meses después, Twitter tomó medidas contra varias cuentas iraníes por sugerencia del FBI.

Por desgracia, el alcance de la colaboración entre las grandes tecnológicas y el Estado de seguridad nacional va más allá de la mera colaboración sobre a quién borrar. En 2019, se reveló que un alto ejecutivo de Twitter era en realidad un oficial de alto rango en la 77ª Brigada del ejército británico, su división dedicada a las operaciones psicológicas y la guerra online. No está claro cómo pudo alcanzar un puesto tan alto en Twitter sin la cooperación consciente del gigante tecnológico. Menos claro aún es por qué la historia fue ignorada casi por completo en los principales medios de comunicación y cómo mantiene su trabajo en Twitter hasta el día de hoy.

Además del nombramiento de Nimmo, hombre de la OTAN, Facebook también mantiene una estrecha relación con la organización militar. En 2018, anunció una asociación con el grupo de corte de la OTAN, el Consejo Atlántico, por el cual el consejo ayudaría a curar los feeds de noticias de sus 2.800 millones de usuarios.

Facebook contrata al jefe de prensa de la OTAN, Ben Nimmo, como jefe de inteligencia

Reddit también contrató a un ex subdirector del Consejo Atlántico de su Grupo de Trabajo de Estrategia de Oriente Medio como su director de política, un movimiento que vinculó el popular sitio de agregación de noticias sociales con el estado de seguridad nacional. Otras grandes empresas tecnológicas como Google, Amazon, Microsoft e IBM han firmado acuerdos comerciales multimillonarios con la CIA, una medida que sitúa a prácticamente toda la industria en la órbita del estado de seguridad nacional.

 

 

El MIC de la “Nueva Era Digital”

“Lo que Lockheed Martin fue para el siglo XX”, escribieron los ejecutivos de Google Eric Schmidt y Larry Cohen en su libro “La nueva era digital”, “las empresas de tecnología y ciberseguridad serán para el XXI”. Su libro fue apoyado de corazón en su contraportada por Henry Kissinger[https://www.mentealternativa.com/del-mediterraneo-al-atlantico-el-imperio-anglo-veneciano-de-la-nobleza-negra/], el director del Consejo Atlántico [que es un centro de pensamiento de la Corona Británica].

La OTAN se fundó tras la Segunda Guerra Mundial como una alianza supuestamente defensiva contra la Unión Soviética. Sin embargo, con la disolución de esta nación en 1991, la OTAN no fue desechada; de hecho, se amplió, tanto en lo que respecta a los países miembros como a sus competencias. La OTAN empezó a declarar que su ámbito de actuación se extendía a todo el mundo y al ciberespacio. En el 70º aniversario de la organización en 2019, su antiguo comandante supremo, el almirante James Stavridis, declaró que en adelante estaría “mucho más comprometida con… la ciberseguridad” y emplearía una “capacidad cibernética ofensiva” mucho mayor. Las últimas acciones de Twitter sugieren que sus proclamas eran acertadas.

 

Propaganda furtiva

Aunque el gobierno soviético controlaba efectivamente todo su aparato mediático, sus ciudadanos eran al menos conscientes de ello y desconfiaban en consecuencia. En Occidente, sin embargo, rara vez se habla del nivel de penetración del Estado en los medios de comunicación, tanto comerciales como sociales. Un sistema de propaganda es mucho más eficaz -y peligroso- cuando los que están dentro no son conscientes de él y se creen libres de influencia. Peor aún, las grandes empresas de medios sociales como Twitter y Facebook dominan el mundo, no sólo un país, lo que significa que su influencia es global. El hecho de que Twitter esté tomando medidas contra las cuentas porque socavan la fe en la OTAN es un signo seguro de la creciente influencia de la organización en los asuntos internos de Twitter.

 

El futuro que nos prepara la OTAN para el 2030

 

Fuente:

Alan Macleod / Mint Press News — Twitter Deletes Dozens of Russian Accounts for “Undermining Faith in NATO”.

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