Primero se vio obligado a convertirse en el amante de un fraile capuchino, y más tarde fue amenazado y golpeado por el fraile porque decidió escapar de esta pesadilla. Esta es la acusación que un joven refugiado hizo contra el padre Antonio Zanotti, fundador de la comunidad de acogida para refugiados y menores en dificultad llamada Oasis 7, ahora en el centro de un nuevo escándalo para la Iglesia Católica. La víctima, quien teme por su vida, ha sido transferida por la policía a un lugar de protección. El joven refugiado ha vivido en la comunidad Oasis 7, con sede en Bérgamo, en el norte de Italia, durante más de cuatro años, como escribe Fiorenza Sarzanini en el periódico italiano Corriere della Sera. Las pruebas que sustentan estas acusaciones están presentes en videos pornográficos y fotos que se han enviado a las autoridades del Vaticano, así como a los italianos, junto con una denuncia por violencia sexual.
‘Intenté quitarme la vida debido a esta terrible experiencia’
Esta ha sido “una experiencia terrible por la que también traté de quitarme la vida” —dice el joven refugiado que finalmente decidió salir a la calle y pedir ayuda. Pero aparentemente este no es un caso aislado. Otros dos jóvenes han presentado su testimonio en la oficina legal de Bernardini De Pace en Via Ipponio 2, en Roma, y están listos para hablar con los fiscales italianos y las autoridades eclesiásticas tan pronto como sea posible para abordar este caso de esclavitud sexual por un fraile capuchino que todavía sirve como sacerdote ordenado.
¿De dónde viene todo el dinero que tiene el padre Zanotti?
Los abogados de las víctimas pidieron una intervención urgente, “especialmente teniendo en cuenta que muchos jóvenes necesitados todavía están involucrados en esta comunidad y porque queremos saber de dónde viene todo el dinero que tiene el padre Zanotti y por qué nadie le ha cuestionado cómo lo está usando.”
‘Al responder a sus solicitudes él me dejaría algo de dinero’
Según lo informado por Corriere della Sera, en 2014, el niño en cuestión llegó a la comunidad de Oasis 7 y declaró lo siguiente en la denuncia:
“En los primeros meses, me sentí bienvenido por el fraile y la comunidad, pero inmediatamente noté el excesivo lujo en el que solía vivir el padre Zanotti, muy lejos de las costumbres franciscanas. Trabajé durante casi un año a cambio de comida y alojamiento, a pesar de que el padre Zanotti me prometió un trabajo regular dentro de poco tiempo en la cooperativa de Renovación de Antegnate en la provincia de Bérgamo, pero después de aproximadamente 3 meses desde mi entrada a Oasis 7 Fray comenzó a acercarse a mí sexualmente, primero con abrazos, luego me invitaba a beber en su habitación, aunque no era mi deseo tener relaciones sexuales con el fraile, no pude resistirme a los avances del padre Zanotti cuando comenzó a darme regalos caros, él podía comprar todo lo que le pedí. Al responder a sus solicitudes él me dejaría algo de dinero.”
Desafortunadamente esta no es la primera vez que un refugiado afirma haber sido utilizado como esclavo sexual por un representante de la Iglesia Católica. Pero los detalles raramente llegan a la prensa. Veremos pues cómo se desarrolla este caso ahora que las miradas están atentas sobre el padre Zanotti.
Fuente:
Leo Zagami — The Catholic friar who enslaves refugees for sex.
