Por Mente Alternativa
Wall Street On Parade hace eco de un artículo de opinión escrito la semana pasada por Arthur E. Wilmarth, Jr., profesor emérito de derecho en la Universidad George Washington. Wilmarth, quien escribió un libro clave sobre las amenazas a la estabilidad financiera por parte de los megabancos estadounidenses, critica la efectividad del plan de resolución de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) para bancos fallidos bajo la Ley Dodd-Frank de 2010.
Esta ley buscaba evitar que los contribuyentes rescataran a megabancos, creando un Fondo de Liquidación Ordenada (OLF) para gestionar estos casos. Sin embargo, Wilmarth revela que desde su creación, el OLF no tiene fondos, ya que el cártel bancario impidió que se les cobraran primas para financiarlo. La FDIC tendría que pedir prestado al Tesoro en caso de quiebras, lo cual es políticamente problemático.
Desde 2008, EE.UU. ha enfrentado tres crisis bancarias sin utilizar el OLF, debido a que los megabancos prefieren préstamos de emergencia de la Reserva Federal. Wilmarth concluye que los megabancos siguen siendo una amenaza para la estabilidad financiera y sugiere aumentar su capital y restaurar la Ley Glass-Steagall para separar los bancos asegurados federalmente de las casas de trading de Wall Street.
Por qué necesitamos una nueva Ley Glass-Steagall para domar a los megabancos