Mientras que los niños sirios que aparecen en el video de los “ataques químicos” de Duma —montado por los Cascos Blancos para justificar el bombardeo de la coalisión de la OTAN a Siria— niegan que haya habido algún ataque o víctima en Duma aquél día, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, cuenta un cuento a un grupo de niños cuando le cuestionan “¿por qué nuestro país bombardeó a otro?” La élite global ha hecho al mundo perder la razón y ha convertido la política internacional en un cuento para niños. Occidente está feliz de bombardear a una nación soberana basada en nada más que “evidencia” no pública que se sospecha que fue montada y provista por los Cascos Blancos, pero cuando los residentes reales de Duma aparecen para contar su versión, son acusados de mentirosos y se les niega la oportunidad de presentar su testimonio en el registro de la OPAQ. Sin duda el ganador en esta farsa es el complejo industrial militar estadounidense del Cabal Illuminati que obtuvo unos mil millones adicionales en contratos de adquisición gracias al último ataque de bandera falsa en Siria.
Guerra química falsa: 17 testigos oculares desmienten ante la OPAQ el ‘ataque químico’ de Duma
Según informa el portal de noticias Red Voltaire, a pedido de la Federación Rusa, 17 testigos oculares del supuesto incidente químico de Duma, se presentaron, el 27 de abril de 2018, en la sede de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ). Todos confirmaron que el supuesto ataque químico nunca existió.
Estos testigos son ciudadanos sirios que aparecen en el video mundialmente divulgado como “prueba” de un presunto ataque químico así como personal del hospital donde fueron grabadas esas imágenes.
Las delegaciones de Estados Unidos, Francia y Reino Unido protestaron contra lo que calificaron de «show» y repitieron que disponen de pruebas que contradicen las declaraciones de estos testigos oculares… pruebas que no presentaron.
Estados Unidos, Francia y Reino Unido bombardearon Siria el 14 de abril estimando que el video incriminado bastaba para probar un supuesto uso de armas químicas por parte del gobierno sirio.
La delegación de la Federación Rusa resaltó que la reacción de las tres potencias occidentales que bombardearon Siria ante las declaraciones de los testigos oculares, que desmienten el supuesto ataque químico, demuestra la mala fe de esos países y que todo fue una manipulación destinada a justificar el bombardeo contra la República Árabe Siria.
La delegación rusa anunció en el encuentro que la Federación Rusa no permitirá ninguna nueva agresión contra la República Árabe Siria.
Los EE.UU. han hecho de la política internacional un cuento para niños
La respuesta que la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, da a un grupo de niños cuando le cuestionan “¿por qué nuestro país bombardeó a otro?”, es básicamente la misma narrativa para idiotas (sin ánimo de ofender a ningún niño) que pretenden hacerle creer a los estadounidenses adultos:
“El presidente quería asegurarse de que algunas personas en el mundo que no estaban siendo amables con otras personas y han hecho cosas muy malas supieran que eso no está bien”, dijo. “Entonces, a veces tenemos que actuar así para disuadir, que significa evitar que otros países hagan cosas malas. Así que eso es lo que esperábamos lograr.
“Why did our country bomb another country?”
“Why did Donald Trump fire James Comey?”
Children put questions to the White House Press Secretary on Take Your Kids to Work Day pic.twitter.com/qhQKcffxaB
— Channel 4 News (@Channel4News) April 26, 2018
Pero insatisfechos con la falsa ingenuidad de esta mentira piadosa, los EE.UU., además gozan haciendo creer a sus ciudadanos adultos y al resto del mundo que ataques químicos de bandera falsa montados con ingenua desesperación —como el video de ciencia ficción filmado por un grupo de actores mejor conocidos como “Cascos Blancos”— todavía pueden hacerse valer como pruebas contundentes para justificar guerras. Quién fuera niño otra vez.
Hassan Diab, de 11 años, quien fue visto en un video de amplia distribución filmado por la controvertida organización de ONG conocida como los “Cascos Blancos”, que se filmaron a sí mismos dándole “tratamiento de emergencia” al pequeño Hassan después del presunto incidente ha hablado sobre el incidente:
“Estábamos en el sótano y escuchamos a la gente gritar que necesitábamos ir a un hospital. Pasamos por un túnel. En el hospital, comenzaron a verter agua fría sobre mí.”
El niño y su familia han hablado con varios medios de comunicación, y afirman que no hubo ningún ataque.
Otros testigos presentes durante la filmación de la “limpieza” hospitalaria de Diab por los Cascos Blancos incluyen al administrador del hospital, Ahmad Kashoi, quien dirige el servicio de urgencias. Kashoi se expresó de este modo en relación al incidente:
“Había personas desconocidas para nosotros que filmaban los trabajos de emergencia, filmaban el caos que estaba teniendo lugar ahí dentro y filmaban a personas que estaban siendo rociadas con agua. Los instrumentos que usaron para humedecerlos con agua en realidad se usaron originalmente para limpiar los pisos”, recuerda Ahmad Kashoi, un administrador de la sala de emergencias. “Eso sucedió durante aproximadamente una hora, les brindamos ayuda y los enviamos a casa. Nadie ha muerto. Nadie sufrió de exposición química.” — RT
Halil al-Jaish, un trabajador de emergencias que atendió a personas en el hospital de Douma el día del ataque, también dio su testimonio en La Haya. Según él, algunos pacientes ingresaron por problemas respiratorios relacionados al polvo pesado presente en el aire después de los ataques aéreos, pero nadie mostró signos de envenenamiento por guerra química.
El hospital recibió personas que sufrieron asfixia por humo y polvo el día del presunto ataque, dijo Muwaffak Nasrim, un paramédico que trabajaba en la atención de emergencia. “El pánico visto en las imágenes proporcionadas por los Cascos Blancos fue causado principalmente por personas que gritaban sobre el presunto uso de armas químicas”, agregó Nasrim, quien fue testigo de las escenas caóticas. Ningún paciente, sin embargo, mostró síntomas de exposición a armas químicas, afirmó. — RT
El paramédico de emergencia Ahmad Saur, de la Media Luna Roja Siria, dijo que su sala de hospital no recibió ningún paciente expuesto a armas químicas el día del presunto incidente, y que todos los pacientes necesitaban atención médica general o ayuda con las lesiones atribuidas a un ataque habitual.
Maniobra psicópata de los EE.UU. para dar mil millones extras al complejo militar industrial
Dicho esto, ninguno de los testimonios de esta gente llegará al “registro oficial.” Pues el representante permanente de Rusia ante la OPAQ, Aleksandr Shulgin, dijo que la OPCW ya entrevistó a seis supuestos testigos de Duma que fueron llevados a La Haya.
“Los otros también estaban listos, pero los expertos se apegan a sus propias pautas. Eligieron a seis personas, hablaron con ellos y dijeron que estaban ‘completamente satisfechos’ y que no tenían más preguntas” — Aleksandr Shulgin.
Shulgin también dijo que las acusaciones de “ciertos países occidentales” contra Rusia y Siria por tratar de “esconder” testigos del ataque, son falsas.
En otras palabras, Occidente está feliz de bombardear a una nación soberana basada en nada más que “evidencia” no pública que se sospecha que fue montada y provista por los Cascos Blancos, pero cuando los residentes reales de Duma aparecen para contar su versión, son acusados de mentirosos y se les niega la oportunidad de presentar su testimonio en el registro de la OPAQ. Sin duda el ganador en esta farsa es el complejo industrial militar estadounidense del Cabal Illuminati que obtuvo unos mil millones adicionales en contratos de adquisición gracias al último ataque de bandera falsa en Siria.
Fuentes:
Red Voltaire — 17 testigos oculares desmienten ante la OPAQ el “ataque químico” de Duma.
Zero Hedge — “No Attacks, No Victims”: Syria Chemical Attack Video Participants Speak At OPCW Briefing.
RT — “¿Por qué nuestro país bombardeó a otro?”: Niños exigen que EE.UU. justifique el ataque a Siria.
