Por Mente Alternativa
En un artículo publicado por Oriental Review, el analista Eric Zuesse advierte cómo Donald Trump prometió en un discurso en la Convención del Partido Libertario el 25 de mayo que, si es reelegido presidente, EE.UU. dejará de gastar miles de millones en guerras ajenas. Sin embargo, el 28 de mayo, el Washington Post informó que en un evento de recaudación de fondos para multimillonarios, Trump sugirió que habría bombardeado Moscú y Pekín si Rusia invadiera Ucrania o China invadiera Taiwán. Esto muestra una contradicción entre lo que promete a los votantes y a los donantes ricos.
Trump asegura a sus votantes que terminará con las guerras de otros, mientras que a los donantes les promete acciones agresivas contra Rusia y China. Esto refleja una doble narrativa: dice a cada grupo lo que quieren escuchar. Si miente a sus donantes, dice la verdad a sus votantes, y viceversa.
La mayoría de sus votantes creen que pondrá fin a las guerras ajenas, mientras que la mayoría de sus fondos de campaña provienen de quienes se benefician económicamente de las guerras. Por lo tanto, hay una tensión entre los intereses de los votantes y los de los donantes. Ambos grupos creen que Trump favorecerá sus intereses, pero la realidad es que uno de los grupos está siendo engañado, subraya Zuesse.
Asimismo, Zuesse observa que, históricamente, los políticos estadounidenses cumplen las promesas hechas a sus donantes y no a los votantes. Esto aplica tanto a Trump como a Biden. Si cualquiera de ellos llega a la presidencia en 2025, es probable que haya una Tercera Guerra Mundial, ya que ambos se han comprometido a no permitir que Rusia gane en Ucrania ni que China retenga Taiwán, lo cual podría ser catastrófico.
Zuesse sugiere que, en lugar de votar por estos candidatos, los votantes deberían considerar opciones alternativas, como el candidato pacifista Coronel Douglas Macgregor, quien no ha recibido fondos de multimillonarios pero que claramente no buscaría escalar conflictos hacia una guerra mundial.
