Por Mente Alternativa
Según datos de la Reserva Federal revisados por Pam Martens y Russ Martens, la Reserva Federal de los Estados Unidos ha estado perdiendo dinero de manera constante desde el 28 de septiembre de 2022, por primera vez en su historia. Hasta el 19 de junio de 2024, esas pérdidas suman un total de $176 mil millones. Los Martens señalan que las pérdidas mensuales en 2024 han variado desde un máximo de $11.076 mil millones en febrero hasta un mínimo de $5.674 mil millones en mayo.
Estas pérdidas son distintas de las pérdidas no realizadas en los valores de deuda que la Fed posee, ya que no se marcan a mercado debido a la intención de mantener los valores hasta su vencimiento, con el principal garantizado por el gobierno de EE.UU.
Las pérdidas operativas en efectivo resultan del hecho de que la Fed está ganando significativamente menos interés en sus valores de deuda que las altas tasas de interés que paga a los bancos depositarios por sus reservas en la Fed; a los fondos mutuos en sus operaciones de recompra inversa; y en pagos de dividendos a los bancos accionistas de las 12 Fed regionales.
Desde el 27 de julio del año pasado, la Fed ha estado pagando un 5.40% de interés sobre los saldos de reservas, beneficiando principalmente a megabancos como JPMorgan Chase y Bank of America. Sin embargo, estos bancos no trasladan esa generosidad a las cuentas de ahorro de sus clientes, que siguen pagando una tasa irrisoria del 0.01%.
En un informe detallado de enero, Paul Kupiec y Alex Pollock, investigadores del American Enterprise Institute, advierten que las pérdidas de la Fed ya han alterado su política monetaria, restringiendo sus opciones al tener que mantener sus valores hasta el vencimiento para evitar realizar pérdidas en efectivo. Sostienen que, mientras el público mantenga la confianza en los depósitos no asegurados de la Fed, esta puede seguir operando con pérdidas y con la carga recayendo en los contribuyentes.