Redes Sociales

Hola, ¿qué deseas buscar?

Ciencia y Tecnología

La Ministra de Salud de los Países Bajos admitió que ‘el ministerio obedece a la OTAN’ y que la respuesta al Covid obedeció a las ‘obligaciones’ definidas por la alianza militar

Recientes declaraciones de la funcionaria Fleur Agema revelan que la respuesta al Covid-19 fue una operación militar coordinada por la OTAN y el NCTV en Países Bajos.

Por José Luis Preciado

Un giro ‘inesperado’ en la narrativa de la pandemia

En un debate parlamentario reciente, la Ministra de Salud de los Países Bajos, Fleur Agema, sorprendió al público al admitir que la gestión de la pandemia de Covid-19 fue en realidad una operación militar liderada por la OTAN y coordinada a nivel nacional por el Coordinador Nacional para Seguridad y Contraterrorismo (NCTV). Estas declaraciones han generado un intenso debate sobre la influencia militar en la política sanitaria y la soberanía de las naciones en tiempos de crisis.

El rol de la OTAN y el NCTV durante la pandemia

Según Agema, las decisiones tomadas durante la pandemia no solo respondían a necesidades sanitarias, sino también a compromisos internacionales adquiridos con la OTAN. Este enfoque implicó una coordinación estrecha entre varias agencias, incluyendo el NCTV y el Ministerio de Defensa.

Durante el debate, la ministra detalló que la preparación ante pandemias y amenazas híbridas es parte de las obligaciones del tratado con la OTAN. Estas declaraciones no solo confirman la influencia militar en la gestión de la crisis sanitaria, sino que también abren la puerta a cuestionamientos sobre la transparencia y los objetivos reales de las medidas adoptadas.

 

Críticas de expertos y activistas

Las reacciones no se han hecho esperar. Prominentes figuras del ámbito médico, como la doctora Els van Veen, han expresado su consternación ante esta revelación. Según Van Veen, “la crisis del Covid-19 fue una operación militar, y el Ministerio de Salud obedecía directamente a la OTAN y al NCTV”. Esta afirmación refuerza las críticas de quienes consideraban excesivas las medidas de control implementadas durante la pandemia.

Otros expertos, como el investigador Cees van den Bos, han ido más allá al calificar al NCTV como un “gobierno en la sombra” que limita la democracia. Para Van den Bos, el nivel de autonomía otorgado al NCTV durante la pandemia muestra un preocupante desbalance en los controles gubernamentales.

 

Cómo el brazo de propaganda de guerra de la OTAN, el Consejo Atlántico, impuso la censura de la verdad sobre el COVID-19

 

Un modelo replicado a nivel internacional

Las revelaciones de Agema encuentran eco en acusaciones previas hechas por figuras como Robert F. Kennedy Jr. Este activista estadounidense afirmó que la producción de las vacunas de ARNm también fue gestionada como una operación militar en Estados Unidos, bajo la dirección del Departamento de Defensa. Según Kennedy, las farmacéuticas actuaron más como fachada comercial que como responsables del desarrollo científico.

Además, el comportamiento de algunos países como Suecia, que adoptaron políticas más flexibles, ha sido interpretado como una excepción debido a su entonces estatus fuera de la OTAN, a diferencia de otros estados miembros que siguieron pautas uniformes.

Implicaciones para el futuro

El reconocimiento de que la pandemia fue manejada como una operación militar plantea serias interrogantes sobre cómo los gobiernos gestionan futuras crisis. Agema señaló que la preparación para pandemias futuras estará alineada con las estrategias de resiliencia nacional, una política que abarca desde desastres naturales hasta amenazas militares.

Si bien esta estrategia busca garantizar la seguridad nacional, también subraya la creciente militarización de las respuestas a emergencias. Esto podría tener implicaciones significativas para los derechos civiles y la confianza pública en las instituciones.

¿Qué significa esto para la ciudadanía?

Para muchos ciudadanos, estas revelaciones generan una mezcla de sorpresa y preocupación. La narrativa oficial de la pandemia, centrada en la salud pública, se ve cuestionada al descubrirse que las decisiones estaban influenciadas por objetivos estratégicos y militares. La falta de transparencia en torno a estas dinámicas puede alimentar aún más la desconfianza hacia las autoridades y sus motivaciones.

En última instancia, el debate sobre la gestión de la pandemia trasciende el ámbito sanitario, planteando preguntas fundamentales sobre democracia, soberanía y el balance de poderes en tiempos de crisis.

Las declaraciones de la ministra Agema marcan un antes y un después en la percepción de cómo se gestionó la pandemia de Covid-19. Más allá de los resultados sanitarios, estas revelaciones exigen una reflexión profunda sobre el papel de las instituciones internacionales y militares en la gobernanza global. A medida que el mundo se enfrenta a nuevas amenazas, la transparencia y la rendición de cuentas serán claves para restaurar la confianza en las decisiones gubernamentales.

 

Exdirector de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades considera ‘verdaderamente posible’ que el COVID-19 haya sido creado en Estados Unidos, y no en China

Contenidos

Por Elena Panina (RUSSTRAT) Richard Fontaine, un analista con amplia experiencia en estos temas (exasesor de John McCain y antiguo miembro del Departamento de...

Contenidos

Por Elena Panina (RUSSTRAT) La Comisión Europea debe enfocarse en prolongar el conflicto en Ucrania como una estrategia para contener a Rusia y prepararse...

Contenidos

El centro de pensamiento financiado por la Mancomunidad del Reino Unido, la OTAN, el Departamento de Estado de los Estados Unidos, Goldman Sachs, los...

Contenidos

El golpe de Estado «legal» se produjo a través de las tontas ilegalidades expuestas por los abogados: las notas desclasificadas de los servicios de...

Archivos

Publicidad siguenos en telegram