Por Mente Alternativa
Después de que el fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI) solicitó una orden de arresto contra el primer ministro de Israel por “crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad”, la corte debe investigar también a quienes han asistido a Israel, escribe Mark Curtis en un artículo publicado por Declassified UK. Los ministros británicos han estado proporcionando apoyo material a Israel durante su ofensiva en Gaza, principalmente de tres formas: suministrando armas, entrenando a personal militar israelí en el Reino Unido, y realizando vuelos de espionaje sobre Gaza.
Documentos judiciales revelan que el Reino Unido tiene licencias de exportación de armas a Israel, y el ejército británico ha llevado a cabo más de 200 misiones de vigilancia sobre Gaza. La negativa del gobierno británico a dar información detallada sobre estas actividades sugiere un intento de evitar acusaciones de complicidad en crímenes de guerra, denuncia Curtis. La CPI tiene legitimidad para investigar a los ministros británicos, ya que es improbable que el sistema judicial del Reino Unido los responsabilice ya que están protegidos legal y políticamente a nivel nacional debido a la “inmunidad de la Corona”.
“Ésta considera que los ministros no pueden cometer un ilícito legal y no actúan como personas, sino como agentes imbuidos de la autoridad de la Corona, por lo que son intocables ante la ley.”
A pesar de los llamados a sancionar a Israel, el Reino Unido sigue fortaleciendo sus relaciones comerciales con Israel. Y la finalidad misma de la CPI es investigar y perseguir la comisión, incluida la complicidad, de los crímenes más graves cuando las autoridades nacionales se niegan a actuar.