El ex jefe de Estado Mayor de la Bundeswehr y presidente del Comité Militar de la OTAN, el general Harald Kujat, advierte que los políticos occidentales hacen cada vez más hincapié en que las entregas de armas están destinadas “no sólo a la defensa de Ucrania, sino también a la victoria ucraniana sobre Rusia”. Como el potencial de la amenaza es que el conflicto de Ucrania no es una disputa entre Ucrania y Rusia, sino un conflicto entre la OTAN y Rusia, se debe evitar un desarrollo de la guerra de Ucrania que exponga a Europa a tal peligro, señala Kujat.
Por El Instituto Schiller
“Puede que estemos más cerca de una situación del tipo de la crisis de los misiles cubanos de lo que muchos creen posible”, advirtió el ex jefe de Estado Mayor de la Bundeswehr y presidente del Comité Militar de la OTAN, el general Harald Kujat, en una evaluación del 12 de junio para el Preussische Allgemeine Zeitung. “La diferencia es que el epicentro no estaría en el Caribe, sino en Europa. Así que es esencialmente en el interés de Europa para evitar un desarrollo de la guerra de Ucrania que nos exponga a este peligro.”
¿Cómo de grande es el peligro? Kujat señala los informes de que Rusia había simulado ataques con misiles Iskander (que pueden estar armados con cabezas convencionales y nucleares) desde su exclave de Kaliningrado. Se informó de que el lanzamiento de práctica fue un lanzamiento simulado contra un objetivo militar en respuesta a un ataque nuclear.
“El mensaje del Ministerio de Defensa ruso aparentemente pretende ser otra advertencia de que el uso de armas nucleares es una opción realista para el gobierno ruso”, escribe.
Advierte que “la estabilidad estratégica cuidadosamente salvaguardada entre las dos grandes potencias [EE.UU. y Rusia] no significa que se elimine el riesgo de una guerra nuclear limitada a Europa. Al contrario: Si los dirigentes rusos opinan que el uso de misiles nucleares de corto alcance no desencadenará un contraataque nuclear por parte de Estados Unidos, el riesgo de un primer uso nuclear para Rusia sería calculable. … [E]l antiguo asesor presidencial de Yeltsin y Putin, Sergey Karaganov, declaró recientemente: ‘También sé, por la historia de la estrategia nuclear estadounidense, que Estados Unidos probablemente no defenderá a Europa con armas nucleares'”.
El potencial de la amenaza es que el conflicto de Ucrania no es una disputa entre Ucrania y Rusia, sino un conflicto entre la OTAN y Rusia. Kujat advierte que los políticos occidentales hacen cada vez más hincapié en que las entregas de armas están destinadas “no sólo a la defensa de Ucrania, sino también a la victoria ucraniana sobre Rusia”. Cita al secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, de finales de abril, diciendo que Estados Unidos “quiere ver a Rusia debilitada hasta el punto de que ya no pueda hacer las cosas que hizo cuando invadió Ucrania.”
“Este es un cambio significativo en el enfoque de la estrategia de Estados Unidos en la guerra de Ucrania”, escribe Kujat. “El centro de gravedad ya no es apoyar a Ucrania en su lucha defensiva, sino debilitar a Rusia como rival geopolítico”.
“Sin embargo, el curso de la guerra hasta ahora muestra que no habrá un vencedor militar en este conflicto. La consecuencia racional, por tanto, no es prolongar la guerra fijando más objetivos estratégicos, sino ponerle fin mediante una paz negociada. El llamamiento a buscar una paz negociada tampoco es un llamamiento a la rendición de Ucrania. Ni siquiera está dirigido a Ucrania.
Los principales actores militares en esta guerra son Estados Unidos y Rusia. “No ha habido negociaciones entre las dos grandes potencias desde que comenzó la guerra. La guerra ha ocupado el lugar de la diplomacia. Es tarea de la política y un imperativo de la razón poner fin al sufrimiento de los ucranianos y a la destrucción del país y evitar que la guerra se convierta en una catástrofe europea”, concluye Kujat. El artículo completo está aquí (en alemán) y aquí en traducción automática al inglés.
Fuente:
The Schiller Institute: Retired German General: Nuclear Simulations Show the Danger—Negotiate, Before It Is Too Late to Prevent Nuclear War! 5 de julio de 2022.
