El 4 de enero de 2019, la agencia de noticias Reuters informó que un juez federal en Maryland dictaminó que la Universidad Johns Hopkins, Bristol-Myers Squibb Co (BMY.N) y la Fundación Rockefeller enfrentarán una demanda de mil millones de dólares por su implicación en un experimento del gobierno de los EE.UU. que infectó a cientos de guatemaltecos con sífilis en los años 1940s.
Como informó Reuters el jueves de de enero de 2019, el juez de distrito Theodore Chuang rechazó el argumento de los acusados según el cual las corporaciones nacionales deberían ser protegidas del mismo modo que las corporaciones extranjeras son protegidas en juicios en los tribunales de los Estados Unidos por abusos de derechos humanos en el extranjero.
La decisión de Chuang es una victoria para 444 víctimas y familiares de las víctimas que presentaron demandas por el experimento, que tenía como objetivo probar la nueva penicilina y detener la propagación de enfermedades de transmisión sexual.
El experimento hizo eco del estudio de Tuskegee del gobierno sobre hombres negros estadounidenses que fueron dejados deliberadamente sin tratar por sífilis incluso después de que se descubriera la penicilina.
Se mantuvo en secreto hasta que un profesor en el Wellesley College de Massachusetts lo descubrió en 2010. Los funcionarios de los Estados Unidos se disculparon por el experimento, y el presidente Barack Obama llamó al presidente de Guatemala para ofrecer una disculpa personal.
Chuang dijo que las demandas en contra de las corporaciones estadounidenses según el Estatuto Federal de Extranjería no fueron “excluidas categóricamente” por la decisión del Tribunal Supremo el pasado 24 de abril de 2017 en el caso Jesner vs. Arab Bank PLC, que cubre a corporaciones extranjeras.
Dijo que la “necesidad de cautela judicial” se “reducía notablemente” cuando las empresas estadounidenses eran acusadas porque no había ninguna amenaza de tensiones diplomáticas u objeciones por parte de gobiernos extranjeros.
El juez también dijo que permitir que el caso de Guatemala sea procesado “promovería la armonía” al dar a los demandantes extranjeros la oportunidad de obtener un recurso en los tribunales de los Estados Unidos.
Según la denuncia, varios médicos de la Fundación Hopkins y Rockefeller participaron en el experimento, al igual que cuatro ejecutivos de los predecesores de Bristol-Myers, los Laboratorios de Bristol y el Instituto Squibb.
Según el diario Zero Hedge, infectar a las prostitutas guatemaltecas con enfermedades de transmisión sexual fue uno de los muchos programas eugenésicos que llevó a cabo el gobierno de los Estados Unidos durante la década de 1940 y después de la Segunda Guerra Mundial. Ahora, las instituciones académicas y las corporaciones involucradas en estos horribles experimentos gubernamentales están siendo atendidas con demandas masivas que podrían ser financieramente devastadoras para el Estado Profundo estadounidense y las familias que lo controlan.
Fuentes:
Reuters — Johns Hopkins, Bristol-Myers must face $1 billion syphilis infections suit.
NBC News — Guatemalans sue over 1940s US syphilis experiments.
Zero Hedge — Johns Hopkins, Bristol-Myers Face $1 Billion Suit For Infecting Guatemalan Hookers With Syphilis.