Redes Sociales

Hola, ¿qué deseas buscar?

Contenidos

¿Fue el enorme apagón en Argentina una operación de sabotaje ‘a la Nord Stream’?

El miércoles 1 de marzo, Argentina sufrió un gran apagón que dejó sin electricidad al menos a 20 millones de personas, el 40% de la población. El ministro de Economía ya ha presentado una denuncia penal pidiendo que se investiguen tres incendios provocados deliberadamente que obligaron al cierre de secciones de la red interconectada, lo que obligó a desconectar la central nuclear Atucha I como medida de precaución afectando a una tercera parte del territorio, cuya red eléctrica no está en buen estado y padece pequeños apagones con cierta regularidad gracias a años de desinversión bajo el gobierno neoliberal macrista. Hay intereses externos para que Argentina no se desarrolle de manera soberana, para que abandone su plan de energía nuclear y siga la agenda verde de descarbonización y desindustrialización impuesta por la aristocracia anglo-veneciana despoblacionista —y su músculo estadounidense— dizque “para salvar el planeta”. Un día después del apagón, el ministro de Asuntos Exteriores de Argentina le informó a su homólogo británico que Argentina se retira del Tratado con Gran Bretaña sobre las Islas Malvinas y pide reanudar las negociaciones.

 

Por EIRNS

Enorme apagón en Argentina. ¿Tratamiento a la Nord Stream?

El miércoles 1 de marzo, Argentina sufrió un gran apagón que dejó sin electricidad al menos a 20 millones de personas, el 40% de la población, en medio de la peor ola de calor que ha sufrido el país en 20 años, así como de una sequía devastadora. Las temperaturas han llegado a alcanzar los 35°C en algunos lugares (la temperatura corporal es de 37°). Grandes franjas de la zona metropolitana de Buenos Aires y al menos otras siete provincias se vieron afectadas y, aunque se restableció parte de la electricidad al cabo de unas horas ese mismo día, la electricidad no se restableció por completo en el país hasta dos días después.

Gracias a años de desinversión bajo el gobierno neoliberal de Mauricio Macri (2015-2019), la red eléctrica argentina no está en buen estado, y se producen pequeños apagones con cierta regularidad. Pero el ministro de Economía, Sergio Massa, ya ha presentado una denuncia penal ante el juez Adrián González Charvay pidiendo que se investiguen tres incendios provocados deliberadamente bajo una línea de transmisión de alta tensión de 500 KW fuera del área metropolitana de Buenos Aires, lo que provocó que se incendiara. Esto a su vez provocó el cierre de secciones de la red interconectada, lo que obligó a desconectar la central nuclear Atucha I como medida de precaución. Eso eliminó 10.000 MW de la red interconectada de los 25.000 MW que era la demanda en ese momento. Seis millones de hogares se quedaron a oscuras.

Casi de inmediato los círculos vinculados a Macri comenzaron a gritar que Atucha representaba una grave “amenaza nuclear” para el país. ¿Quién necesita energía nuclear?

La cuestión pertinente aquí es si el apagón representa un ataque a la infraestructura civil del país, de la que el Presidente de Rusia, Vladimir Putin, advirtió que podría producirse a escala internacional si no se investigaban a fondo las revelaciones de Seymour Hersh sobre el papel de Estados Unidos en la voladura del Nord Stream. Fíjense en las amenazas que los círculos geopolíticos estadounidenses y occidentales lanzan contra el puerto peruano de Chancay que China está construyendo. Fíjense en las amenazas que profirió contra Argentina la representante María Elvia Salazar (republicana por Florida), en la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes el 1º de marzo, por atreverse este país a colaborar con China en asuntos espaciales y militares; dijo que Argentina ha “hecho un pacto con el diablo” y amenazó con que “deben estar prevenidos” antes de que sea demasiado tarde.

Julio De Vido, ex ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios en las presidencias de Ernesto Kirchner, y de Cristina Fernández de Kirchner (2003-2015) (que ha participado en dos conferencias internacionales del Instituto Schiller) declaró a Radio Gráfica el 3 de marzo: “Creo que ahí hay intereses de que Argentina abandone su plan nuclear, por eso se le dio tanto protagonismo a Atucha por la caída del sistema. Hay toda una operación tendiente a voltear los acuerdos que habíamos firmado nosotros con China y con Rusia para la construcción de tres centrales nucleares más. Quieren vincular la obra con la corrupción y energía sucia”.

Luego, con agudeza, señaló, “Hay que mirar cómo le va a Alemania, que está volviendo al carbón y encima los yankis le volaron el gasoducto que habían construido con Rusia para asegurar el suministro”, en referencia a las revelaciones que hizo el periodista estadounidense Seymour Hersh. La realidad, explicó, “es que hay intereses por parte de Estados Unidos para que el país no se desarrolle de manera soberana. Lo dijo Laura Richardson [jefa del Comando Sur] muy clarito, nada de litio, nada de energía nuclear y recursos energéticos”.

En cuanto a endilgarle la culpa por el apagón a Atucha, De Vido le dijo a La Política Online que la “Operación Atucha” tiene “ribetes geopolíticos”. El país está a punto de completar su planta de enriquecimiento de uranio que es 100% argentina; y la Central Argentina de Elementos Modulares (CAREM) está por terminar su prototipo de reactor modular pequeño, “y esto no les gusta nada a las potencias nucleares. Esto le preocupa al Comando Sur. Poner a Atucha como responsable no fue un error casual”.

 

Argentina se retira del Tratado con Gran Bretaña sobre las Islas Malvinas y pide reanudar las negociaciones

Argentina se retiró de forma unilateral del pacto Foradori-Duncan, firmado en septiembre del 2016 entre el ministro de Asuntos Exteriores británico, sir Alan Duncan, y el vicecanciller argentino, Carlos Foradori, que fue muy polémico en el momento de su firma por las concesiones que el entonces Presidente de Argentina, Mauricio Macri, hizo a Londres, donde siempre han estado sus lealtades. El ministro de Asuntos Exteriores de Gran Bretaña, James Cleverly, fue informado de esta decisión por su homólogo argentino, Santiago Cafiero, durante la reunión bilateral que mantuvieron al margen de la reunión de Ministros de Asuntos Exteriores del G20 celebrada los días 1 y 2 de marzo en la India.

El gobierno de Argentina ha dicho que el pacto del 2016 fue ‘‘perjudicial” para los reclamos de soberanía del país sobre las islas. El pacto “hizo concesiones a los intereses británicos respecto a la explotación de los recursos naturales argentinos en la región y retrocedió significativamente en el justo reclamo de soberanía, además de autorizar conexiones aéreas entre las islas y terceros países”, dijo una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores que pidió el anonimato, según el Buenos Aires Times.

Por su parte, la Cancillería Argentina informó en un comunicado que ‘‘el jefe de la diplomacia argentina formuló una propuesta para reiniciar negociaciones por la soberanía en la Cuestión Malvinas e invitó a concretar una reunión para concertar la agenda de negociaciones en la sede de Naciones Unidas en Nueva York”. En respuesta, Cleverly puso el siguiente mensaje en Twitter: ‘‘Las Islas Malvinas son británicas. Los isleños tienen derecho a decidir su futuro: han elegido seguir siendo un territorio de ultramar autónomo del Reino Unido”.

La nota entregada por Cafiero a Cleverly señala que Argentina ha buscado colaborar en asuntos concretos como vuelos, actividad científica en la Antártida o conservación y preservación de recursos pesqueros, ‘‘sin que la disposición demostrada por la Argentina haya sido respondida de manera recíproca por su gobierno”. Por el contrario, dijo, ‘‘el Reino Unido ha realizado continuadamente actos unilaterales, que han sido oportuna y debidamente protestados por la República Argentina. Asimismo, a lo largo de este tiempo, el gobierno británico se ha negado sistemáticamente a reanudar las negociaciones de soberanía a que reiteradamente instan las Naciones Unidas y que exige el artículo 2(3) de la Carta”.

Las respuestas de Gran Bretaña a la decisión de Argentina apestan a la acostumbrada mentalidad imperial. El ministro de Gran Bretaña para las Américas, David Rutley, calificó la decisión de “decepcionante”, y recalcó con arrogancia que “Argentina ha decidido alejarse de un acuerdo que ha reconfortado a las familias de los fallecidos en el conflicto de 1982”. La declaración oficial del “gobierno de las islas Falklands” dice que esto es “otro ejemplo de que Argentina no es lo suficientemente adulta como para hablar con nuestro país sobre temas que apoyarán su desarrollo y que tiene importancia regional y global”. Añaden que las “discusiones sobre su soberanía no son negociables”.

Las islas Malvinas —que los británicos llaman Falklands— fueron confiscadas ilegalmente por el imperio británico en 1833 y retenidas desde entonces. El 2 de abril de 1982, Argentina retomó las islas a lo que Londres respondió con un despliegue de la OTAN fuera de su área y una guerra de dos meses que terminó con la derrota de Argentina.

 

¿Es EEUU culpable de los ataques a las redes eléctricas en Rusia y Sudamérica?

 

Fuentes:

EIRNS: Enorme apagón en Argentina. ¿Tratamiento a la Nord Stream? 7 de febrero de 2023.

EIRNS: Argentina se retira del Tratado con Gran Bretaña sobre las Islas Malvinas y pide reanudar las negociaciones. 7 de marzo de 2023.

Contenidos

Por Mente Alternativa El equipo jurídico que representa a las poderosas aseguradoras británicas Lloyd’s Insurance Company y Arch Insurance afirma que, dado que “lo...

Contenidos

Israel se enfrenta ahora al dilema de mantener su poder de disuasión sin alienar a sus aliados árabes y occidentales. ¿Cuál es la lógica...

Contenidos

En un artículo publicado por Declassified UK, el periodista John McEvoy revela la conexión entre más de una docena de aristócratas de la Cámara...

Contenidos

Por Mente Alternativa Fuentes diplomáticas de Oriente Medio informan de que Londres está utilizando a sus agentes para prolongar aún más el conflicto palestino-israelí...

Archivos

Publicidad siguenos en telegram