El 9 de noviembre de 2015, la Revista Nature publicó un artículo [1, 2] sobre un experimento que creó una versión híbrida de un coronavirus de murciélago, relacionado con el virus que causa el SARS (síndrome respiratorio agudo severo), lo que desencadenó un renovado debate sobre si merece la pena diseñar variantes de laboratorio de virus con posible potencial pandémico.
“Los científicos investigaron un virus llamado SHC014, que se encuentra en los murciélagos de herradura de China. Los investigadores crearon un virus quimérico, compuesto por una proteína de superficie del SHC014 y la columna vertebral de un virus del SARS que había sido adaptado para crecer en ratones y para imitar la enfermedad humana. La quimera infectó células humanas de las vías respiratorias, demostrando que la proteína de superficie del SHC014 tiene la estructura necesaria para unirse a un receptor clave de las células e infectarlas. […] Aunque casi todos los coronavirus aislados de murciélagos no han sido capaces de unirse al receptor humano clave, el SHC014 no es el primero que puede hacerlo. En 2013, los investigadores informaron de esta capacidad por primera vez en un coronavirus diferente aislado de la misma población de murciélagos [3].”
En la sección de agradecimientos, el estudio dice:
“La investigación fue apoyada por subvenciones del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas y del Instituto Nacional del Envejecimiento de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de los Estados Unidos con las becas U19AI109761 (R.S.B.), U19AI107810 (R.S.B.), AI085524 (W.A.M.), F32AI102561 (V.D.M.) y K99AG049092 (V.D.M.), y por los premios 81290341 de la Fundación Nacional de Ciencias Naturales de China (Z.-L.S.) y 31470260 (X.-Y.G.), y por la financiación USAID-EPT-PREDICT de EcoHealth Alliance (Z.-L.S.). Los cultivos de epitelio de las vías respiratorias humanas fueron financiados por el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de los NIH bajo el premio NIH DK065988 (S.H.R.). También agradecemos a M.T. Ferris (Dept. de Genética, Universidad de Carolina del Norte) por la revisión de los enfoques estadísticos y a C.T. Tseng (Dpto. de Microbiología e Inmunología, Universidad de Texas Medical Branch) por proporcionar células Calu-3. Los experimentos con la longitud completa y los virus recombinantes SHC014 quiméricos se iniciaron y realizaron antes de la de la pausa en la financiación de la investigación del GOF y desde entonces han sido revisados y aprobados para y han sido revisados y aprobados por los NIH para continuar con el estudio. El contenido es responsabilidad exclusiva de los autores y no representa necesariamente la opinión oficial de los NIH.”
En la versión original del artículo publicado inicialmente en línea, los autores omitieron reconocer una fuente de financiación, la USAID-EPT-PREDICT de EcoHealth Alliance, a Z.-L.S. El error fue corregido posteriormente en las versiones impresa, PDF y HTML del artículo.
PREDICT fue un programa de investigación epidemiológica financiado por una subvención de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Lanzado en 2009, el programa fue descrito como un sistema de alerta temprana de pandemias.
Notas / Fuentes:
[1] Declan Butler, Revista Nature: Engineered bat virus stirs debate over risky research; 12 de noviembre de 2015.
[2] Vineet D Menachery, et al: A SARS-like cluster of circulating bat coronaviruses shows potential for human emergence; en Nature, 9 de noviembre de 2015.
[3] Xing-Yi Ge, et al: Isolation and characterization of a bat SARS-like coronavirus that uses the ACE2 receptor; Nature
. 2013 Nov 28;503(7477):535-8. doi: 10.1038/nature12711. Epub 2013 Oct 30.
[4] Wikipedia: PREDICT (USAID).
COVID-19: Los laboratorios secretos de bio-armas del Pentágono y el jesuita Anthony Fauci