Por Mente Alternativa
El Instituto Schiller hace eco de una entrevista reciente en la que el ex diplomático Chas Freeman utilizó su experiencia diplomática para evaluar históricamente los problemas mundiales y ofrecer una solución.
Destacó que las naciones del G7, a las que llama un “club de poderes imperiales”, ya no siguen los mandatos de la ONU ni las directrices de acuerdos internacionales, creando un “orden basado en reglas” que consideran hipócrita y arbitrario. La “Mayoría Global” prefiere la Carta de la ONU y acuerdos internacionales, viendo el “orden basado en reglas” como una narrativa que niega la realidad.
Freeman señaló que esta “Mayoría Global” está creando un nuevo orden “multi-nodal”, donde los países interactúan a diferentes niveles. A pesar de las tensiones políticas, países como EE.UU. y China mantienen grandes interacciones económicas. Países como Brasil, Arabia Saudita, Turquía, Nigeria, México, Polonia e Indonesia están ganando influencia regional y mundial.
Freeman criticó que EE.UU. ha perdido su dominio en todos los campos excepto en lo militar y que su obsesión con una ideología democrática se está volviendo más autoritaria. Señaló que la pérdida de democracia en EE.UU. es autoinfligida, denigrando a la ONU y paralizando su Consejo de Seguridad. Abogó por reconstruir o reemplazar la ONU, pero no liderado por EE.UU., que prefiere sanciones y ostracismo a la diplomacia.
Advirtió que la autosuficiencia puede ser perjudicial, ejemplificando con China en 1793. Mientras el G7 retrocede, China ha evitado el aislamiento y se ha convertido en una potencia dinámica. Las políticas de sanciones y intimidación solo crean resentimientos duraderos. Freeman concluyó que para evitar una guerra total, necesitamos volver al enfoque de respeto mutuo del Tratado de Westfalia.
¿Aceptará alguna vez el hegemón un nuevo orden mundial westfaliano?