Brexit y el colapso: el imperio británico todavía busca cómo sobrevivir a todo esto. El Brexit, la ruptura del Reino Unido con la Unión Europea, está procediendo del mismo modo que el derrumbe de los partidos políticos en Estados Unidos, en la forma inexorable que había pronosticado Lyndon LaRouche años atrás, y por los mismos motivos, lo cual coloca a la más bien desesperada oligarquía financiera británica en aguas inexploradas. La gran cuestión para la City de Londres es, sí bajo el Brexit, podrán negociar un régimen de “equivalencia permanente” con la Unión Europea (UE) para sus servicios financieros. Un artículo del diario británico Guardian del 12 de febrero explica que “al final del período de transición, el sector de los servicios financieros británicos ya no tendrá el derecho de operar en la UE como lo hace hoy en día. Ahora la City dependerá de que a juicio de Bruselas, las regulaciones y el sistema de supervisión del Reino Unido son lo suficientemente sólidos; una decisión de equivalencia, como le dicen, que puede ser cambiada con un aviso de solo 30 días”. El motivo por el cual los británicos quieren más bien un “acuerdo de equivalencia” es que les permitiría “a las firmas de inversión y a las cámaras de compensación, darle el servicio a los clientes europeos desde su propia sede básicamente, y evitarse tener que establecer una subsidiaria en la UE”. En otras palabras, les permitiría mantener el control del corretaje mundial de derivados financieros y del sistema financiero transatlántico en general.
El negociador del Brexit por parte de la UE, Michel Barnier, provocó el martes 11 un alboroto cuando le dijo al gobierno de Boris Johnson, en un discurso, que: “Quisiera aprovechar esta oportunidad para dejar en claro a ciertas personas en la autoridad del Reino Unido que no se engañen con relación a esto. No va a haber una equivalencia abierta como la que hay ahora en servicios financieros, ni habrá otro acuerdo financiero o de gestión con el Reino Unido. Nosotros mantendremos el control de estas herramientas, y vamos a quedarnos con la mano libre para tomar nuestras propias decisiones”.
La cuestión surgió debido a que, supuestamente, “un documento informativo, que se capturó mediante una cámara con un lente de largo alcance tomado de Downing St. [sede del Primer Ministro] el lunes, sugiere que el Reino Unido procuraría en las próximas negociaciones un régimen de ‘equivalencia permanente’ para los servicios financieros que duraría por ‘décadas por venir’ ”, según reportó el Guardian. Ahora bien, ¿una cámara con un lente de largo alcance? ¡Por favor! ¿Así le llaman a las filtraciones anónimas ahora?
El mismo Guardian comentó con mucha angustia: “Aunque las pláticas en torno al Brexit se han centrado en los bienes, el capítulo de los servicios financieros en cualquier acuerdo comercial es algo fundamental para el Reino Unido. Emplea a más de un millón de personas y contribuye a la economía con £127 mil millones de libras esterlinas, según [el secretario de Hacienda, Sajid] Javid en un artículo en City AM el martes”.
Parlamento europeo ratifica el Brexit: Reino Unido abandona la UE con un discurso dramático
Fuente:
LaRouche PAC — El Brexit y el derrumbe: el imperio británico busca todavía cómo sobrevivir a todo esto.