En su desesperación, Washigton intenta desviar la atención de la conclusión extraída por el aclamado reportero Seymour Hersh, quien en días pasados documento cómo Estados Unidos destruyó los gasoductos para sabotear la integración euroasiática en el marco de la consolidación del nuevo orden multipolar.
Por Mente Alternativa
El último informe de The New York Times sobre el atentado contra el gasoducto Nord Stream no es lo que parece.
Según las fuentes anónimas del gobierno estadounidense de The New York Times (1), los oleoductos fueron destruidos por un grupo de bandoleros “pro-ucranianos” que no tenía conexiones conocidas con ninguna agencia militar o de inteligencia, pero de alguna manera tenía toda la información, habilidades, equipo de buceo y explosivos militares necesarios para llevar a cabo un ataque de este tipo (sic).
La historia fraudulenta The New York Times es un insulto a la inteligencia que sólo pone en relieve la desesperación con la que Washington intenta desviar la atención de la conclusión extraída por el aclamado reportero Seymour Hersh, quien en días pasados documento cómo Estados Unidos destruyó los gasoductos para sabotear la integración euroasiática. Además, llama la atención que el artículo haya sido publicado en un momento estratégico en el que se disuelve el apoyo a la guerra delegada de la OTAN contra Rusia en Ucrania.
Cómo Estados Unidos destruyó los gasoductos Nord Stream, por Seymour M. Hersh
Notas a pide de página
1. Adam Entous, Julian E. Barnes y Adam Goldman: Intelligence Suggests Pro-Ukrainian Group Sabotaged Pipelines, U.S. Officials Say. 7 de marzo de 2023.
