La perseguida periodista Janet Phelan habla desde el exilio sobre su trabajo de investigación en armas biológicas, la Ley Patriota y otras leyes que fueron modificadas en los Estados Unidos para preparar el terreno para lanzar la pandemia de Covid-19 con lujo de inmunidad legal.
Extractos de la entrevista:
“Poco después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, me quedó claro que eventualmente habría una pandemia, y que había una intención secundaria detrás del 9-11, que no sólo consistía en quitarnos nuestras libertades sino en llevar a cabo un atentado con armas biológicas o una pandemia, cuya diferencia no podríamos notar a menos que nos lo dijeran.”
“Desde hace años enfoque mi trabajo en estudiar las modificaciones que han venido haciendo a las leyes sobre armas biológicas a partir del 9-11. La primera que estudié fue la sección 817 de la Ley Patriota de los Estados Unidos, en la que Estados Unidos se otorga a sí mismo inmunidad por violar sus propias leyes sobre armas biológicas.”
“La Convención sobre Armas Biológicas [un nuevo instrumento de 1975 complementario al Protocolo de Ginebra de 1925] tiene lugar cada año en Ginebra, Suiza. Los Estados deben evitar involucrarse en actividades relacionadas con la producción de armas biológicas, y en caso de llevarlas a cabo o hacer cambios a sus leyes, deben reportarlo a la Convención. Sin embargo, la modificación a la sección 817 de la Ley Patriota de los Estados Unidos nunca fue reportada a la Convención. Además, Estados Unidos mintió activamente a la Convención… Entonces, profundicé en el tema de las obligaciones de los Estados para con la Convención, y descubrí que había una multitud de indicaciones de que Estados Unidos presentaba información falsa a la Convención de manera generalizada.”
“Es decir, que hubo leyes posteriores [al 9-11] aprobadas en los Estados Unidos con el objetivo de proveer niveles de protección para lo que yo he denominado un ‘sistema de lanzamiento de armas químicas y biológicas’.”
“Ahora mismo la gente está muy preocupada por las vacunas, lo cual es normal pues se trata de vacunas experimentales que no han sido autorizadas por la FDA excepto para su uso de emergencia, y que según el portal de los CDC están produciendo numerosas reacciones adversas incluyendo la muerte. Ese es sólo un nivel de preocupación. Pero hay otros dos vectores que podrían ser potencialmente activados en un escenario pandémico… que también podrían incrementar el número de muertes, y que podrían ser atribuidas a la pandemia aunque no tienen nada que ver con esta. Uno es la preocupación por la infraestructura de los sistemas de agua de EE.UU., que yo documenté con planos y conversaciones con funcionarios públicos —lo que me obligó a exiliarme—, y que podrían ser utilizados para un ataque selectivo con armas de destrucción masiva durante un confinamiento. La otra preocupación que he documentado es la existencia de lo que llamamos evenenamiento bajo prescripción selectiva con ‘medicamentos impostores’… Esta triangulación de factores podría activarse durante un escenario pandémico usando las vacunas, el sistema de agua y los medicamentos envenenados.”
Fuente:
The Conscious Resistance: This Journalist Predicted COVID1984 As Far Back as 2006.
