Por Mente Alternativa
En un nuevo capítulo de la guerra tecnológica entre China y Estados Unidos, Pekín ha anunciado la prohibición de exportaciones de materiales estratégicos como el galio, germanio y antimonio. Estos elementos, esenciales para aplicaciones tecnológicas avanzadas y con potencial uso militar, serán retenidos del mercado estadounidense tras las recientes sanciones impuestas por Washington.
El Departamento de Comercio de Estados Unidos amplió esta semana la lista de empresas chinas sujetas a restricciones, incluyendo 140 compañías relacionadas con la producción de chips de alto rendimiento. En respuesta, el Ministerio de Comercio chino calificó las medidas como una amenaza a sus derechos e intereses, y tomó esta drástica decisión como represalia.
El impacto de esta medida es significativo, ya que la industria tecnológica estadounidense depende de estos materiales para fabricar semiconductores y otros dispositivos clave. La escalada subraya cómo las tensiones entre ambas potencias afectan las cadenas globales de suministro.
Con este movimiento, China busca reafirmar su posición en el mercado tecnológico global, mostrando que las sanciones no quedarán sin respuesta.