Tras los recientes ataques supuestamente terroristas en el Reino Unido la Primer Ministro Theresa May convocó a la regulación de internet así como a la supresión de herramientas digitales que —según ella— facilitan “espacios seguros” en línea a través de los que se puede coordinar ataques terroristas. Expertos niegan que las medidas preventivas promovidas por Gran Bretaña tengan alguna otra utilidad que radicalizar, estigmatizar y dividir aún más a la sociedad. Por eso el control y censura de Estado en internet, más que una medida para erradicar el terrorismo, parece una estrategia del Nuevo Orden Mundial para privar a la gente de su derecho a la libertad y conducirla hacia un mundo orwelliano en el que “Big Brother” seguirá cada una de nuestras interacciones con otros seres humanos dentro y fuera de la red.
La propuesta de la Primer Ministro Theresa May surgió justo un día después del ataque del sábado por la noche en la ciudad de Londres que dejó siete muertos y cerca de 50 heridos. En su reacción a los ataques, la Ministro May dijo:
“No podemos permitir que esta ideología goce del espacio que requiere para reproducirse. Sin embargo eso es precisamente lo que internet y las grandes corporaciones que proveen servicios de internet proveen. (…) Tenemos que trabajar con gobiernos democráticos aliados para lograr acuerdos internacionales que regulen el ciberespacio para prevenir la proliferación de la planeación del extremismo y el terrorismo.”
May no especificó cómo es que el gobierno planea usar la regulación de internet para controlar la conspiración terrorista en redes sociales o foros en línea. No obstante, la frase “acuerdos internacionales” es presagio de un movimiento potencialmente más grande de gobiernos y corporaciones de todo el mundo para intervenir y atacar interacciones humanas lingüísticas consideradas como “peligrosas.”

¿Quién es quién en el caos del Nuevo Orden Mudial? Foto: independent.co.uk.
La corporatocracia ya ha empezado a trabajar para restringir el lenguaje extremista en Facebook, Twitter, Youtube y Google —con grados variables de éxito— pero no todo mundo cree que esta estrategia será efectiva para desvertebrar la actividad terrorista.
Peter Neumann, profesor de violencia política y radicalización en el King’s College de Londres dice que la censura en internet sólo conseguirá que los terroristas muden sus conversaciones a plataformas encriptadas. Además que la mensajería en línea y el uso de las redes sociales para radicalizar a nuevos miembros raras veces es suficiente para formar nuevos terroristas.
Los esfuerzos preventivos del gobierno británico para criminalizar la protesta y el lenguaje —medida que parece una calca de la legislación que está siendo bosquejada por legisladores de los Estados Unidos— han sido referidos como estrategia “Big Brother” y de acuerdo al Relator Especial de ONU, Maina Kiai, se trata de una política preventiva defectuosa.
“En general parece que la política de prevención (Prevent) está teniendo un efecto opuesto al deseado, pues dividiendo, estigmatizando y alienando segmentos de la población esta política preventiva podría acabar promoviendo el extremismo más que contrarrestarlo.”
Estudiantes, activistas y miembros de organizaciones relacionadas con la fe han relatado anécdotas que exponen cómo la forma en que se implementa este programa sólo se traduce en crudeza racial, ideológica, cultural y estigmatización religiosa con efectos concominantes en el derecho a la libertad y asociación de algunos grupos.
El fracaso de los países Occidentales para prevenir el terrorismo a pesar de la estructura de estados policíacos que ha conformado —especialmente en el Reino Unido— se ha ganado toda una serie de críticas y teorías justificadas que van desde las que lo califican como un retroceso derivado de la Guerra contra el Terror que en dieciséis años se ha cobrado la vida de más de 1.3 millones de seres humanos en Oriente Medio, a las que prueban con evidencias precisas que los “ataques terroristas” son meras operaciones de bandera falsa diseñados por la élite global que opera detrás de los Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel con la finalidad de crear caos y miedo en la población para justificar la imposición de medidas autoritarias que sólo favorecen la implementación de la agenda el Nuevo Orden Mundial. Lo más probable es que las regulaciones draconianas de internet solamente dividirán, estigmatizarán y radicalizarán más a la gente y el Estado les despojará además de sus libertades.
Como se sabe la élite global del Nuevo Orden Mundial que opera a través de agencias de los Estados Unidos y países como Catar y Arabia Saudita en Oriente Medio, es quien realmente financia y entrena a la organización terrorista ISIS, pues ningún país en Oriente Medio se beneficia con las guerras imperialistas disfrazadas de guerras contra el terrorismo más que el cartel del petróleo de la élite global.
El modus operandi de el Cabal es muy simple: Para poder implantar su sistema control orwelliano (tesis), ellos crearon y financian el terrorismo (antítesis), para justificar su tesis a través de la síntesis de estas dos. En pocas palabras, implantan el orden totalitario a través del caos. Por ello no es difícil darse cuenta que la estrategia de contra-terrorismo draconiano al estilo “Big Brother” que seguramente se implementará en el Reino Unido es parte la agenda del Nuevo Orden Mundial para instaurar su gobierno mundial totalitario.
La élite global asesina niños para justificar la intervención militar en Siria
Fuentes:
1. Theresa May says the internet must be now regulated following London Bridge terror attack.
2. Activist Post.
3. ‘Clinton & ISIS funded by same money’ – Assange interview w/John Pilger.
