Por Mente Alternativa
Cynthia Rush, de Executive Intelligence Review (EIR), hace eco de un artículo publicado en American Conservative, Justin Logan, director de estudios de defensa y política exterior en el CATO Institute, advierte sobre los riesgos de que el presidente Trump sea arrastrado a una guerra contra Irán. Según Logan, esta sería una “proposición perdedora” que dañaría tanto al país como al legado del mandatario.
Logan critica la actual campaña militar contra los hutíes en el Mar Rojo, señalando que Estados Unidos está subsidiando el comercio de China y Europa mientras gasta recursos valiosos en defender el tráfico marítimo de ataques con drones y misiles de baja tecnología. “Esto no es poner a Estados Unidos primero”, afirma. Además, advierte que una escalada contra los hutíes no cambiaría el resultado actual y solo agotaría más los recursos militares, ya tensionados por la guerra en Ucrania.
Pero el verdadero peligro, según Logan, radica en las presiones para iniciar una guerra total contra Irán. Este conflicto, advierte, sería mucho más costoso y complejo que la guerra en Irak, dada la mayor población y capacidad militar de Irán. El experto cita al vicepresidente J.D. Vance, quien en octubre pasado advirtió que los intereses de Estados Unidos e Israel no siempre coinciden, y que una guerra con Irán sería una “distracción masiva de recursos” y extremadamente costosa.
Logan concluye que una guerra contra Irán no solo sería un error estratégico, sino que también socavaría el objetivo declarado por Trump de evitar conflictos innecesarios. “Para proteger su legado y poner a los estadounidenses primero, el presidente Trump debería decir no a quienes lo empujan a otra guerra en Medio Oriente”, afirma.
Cynthia Rush, de EIR, subraya la importancia de evitar conflictos que no beneficien a Estados Unidos y refuerza la necesidad de una política exterior pragmática.
