Por Mente Alternativa
En un artículo reciente publicado en su blog, el politólogo Constantin von Hoffmeister expone cómo el reciente evento en el que el rey Carlos III fue nombrado “gran jefe” en Samoa muestra a un monarca británico aferrado a la relevancia en un trono que evoca el imperio.
Vestido con una camisa de safari, Carlos encarna el recuerdo de una era de dominio colonial, en la que los británicos gobernaban tierras extranjeras con esplendor y armas, explotando sus recursos. Sin embargo, esta imagen no es solo un guiño al pasado; refleja cómo el colonialismo occidental ha adoptado una nueva apariencia bajo el liberalismo, pero sin intención real de abandonar su rol de dominación.
Con una actitud de superioridad, el evento simboliza que el Reino Unido, y el Occidente que representa, simplemente ha transformado su discurso colonial en algo más aceptable para la actualidad, pero manteniendo su aspiración de control sobre quienes considera “no desarrollados.”