En esta breve y emotiva publicación, la juez estadounidense Anna von Reitz explica cómo las organizaciones jabadista y el lobby sionista estadounidense son meros testaferros (o leyendas de cobertura) de una estructura más profunda de poder que actualmente conduce hasta Londres, Roma y el Papa, e históricamente hasta una misteriosa hermandad de la Antigua Babilonia. Los sionistas en Israel, dice Reitz: “son arrastrados de la nariz por Londres y Roma y, sin saberlo, apoyan su propia destrucción… pero ¿qué opción tienen? si Israel fue creado por Londres y Roma, depende de Londres y Roma para su existencia, y puedo imaginar que su destrucción por Londres y Roma ya esté en el horizonte. Israel es el chivo expiatorio en esta historia prediseñada.”
Día tras día veo artículos e historias de noticias dirigidas a los “malvados sionistas” y acusando a la Asociación Jabad-Lubavitch de toda clase de malas acciones. Eso es correcto solo hasta cierto punto. Las manos sionistas no están limpias, sin embargo, quienes inventan todas estas noticias (y la mayoría de ellas son literalmente inventadas) no cuentan toda la historia. Pues son los británicos quienes se encuentran al final de esa pila de perros, como casi todo lo que sale mal en el mundo.
¿Quién creó el protectorado británico? El Papa y la Reina, los mismos Mal-Actores responsables del Sistema de Esclavos de Babilonia en todo el mundo. ¿Quién etiquetó a Palestina y creó los “Palestinos”? El Papa y la Reina, actuando de nuevo en concierto. ¿Quién ha tenido sus narices atascadas en la política de Medio Oriente desde Lawrence de Arabia? El Papa y la Reina, de nuevo.
Es hasta monótono. Aburrido. Ni siquiera te molestes en buscar otras respuestas, porque ya las tenemos.
Ellos no solo crearon Palestina. También crearon a Israel y establecieron todo el campo de juego para inculcar un “estado de guerra permanente” en el Medio Oriente, tal como lo hicieron en Estados Unidos.
Y todo el tiempo han fingido ser los terceros inocentes o los santos que tratan de hacer lo correcto.
Patrañas.
No es lo que dicen —es lo que hacen, y los frutos de lo que hacen, lo que cuenta.
Ellos crearon y montaron a los actores, y jugaron sus papeles a la perfección, pero al final de la palabra, siguen siendo malos actores y sus huellas digitales permanecen firmemente adheridas a todo su show.
¿Y por qué lo hicieron? ¿Acaso ellos tienen un sueño no cumplido de “regresar a los judíos a su hogar en Canaán?” La realidad no es tan romántica como parece.
Lo que el Papa y la Reina realmente querían es mejorar sus posesiones en el Medio Oriente, establecer un nuevo “Hotel” en Broad Street, una base de operaciones desde la cual puedan monitorear todo y a todos en el Medio Oriente e interferir sin cesar en la política de la región y de ser posible, desde su punto de vista, controlar el petróleo del Medio Oriente, para mantenerlo goteando muy lento y costoso pero seguro y fuera de la región durante décadas.
Así que han agotado los suministros de petróleo de Oriente Medio y se han beneficiado de eso, y ahora, han abierto los suministros de petróleo de Estados Unidos y todos fingen que es una gran sorpresa que Estados Unidos y Canadá tengan reservas de petróleo y gas que hacen que el Medio Oriente se ve pequeño en comparación.
¡Diablos! Nos han mentido de nuevo.
Y eso realmente no debería ser una sorpresa, ¿verdad?
Las reservas de petróleo y gas que estamos explotando en Estados Unidos se conocen desde la década de 1890. La Política de Recursos Naturales de Theodore Roosevelt se ha aplicado hábilmente: compre los recursos naturales de todos los demás por centavos de dólar y ahorre los nuestros hasta que se agoten, de modo que todos dependan de nosotros y estén obligados a pagar diez veces más de lo que pagamos por ellos.
Tan solo mira cómo giran las ruedas. ¿De dónde surge todo el sufrimiento en Venezuela? Nada más que de la crueldad y la codicia de Londres y Washington, DC, que intentan acaparar el mercado y controlar totalmente las reservas de petróleo y gas en las Américas. ¿Qué es ISIS? Un grupo de trabajo multinacional de mercenarios de operaciones especiales comprado y pagado por el Banco de Inglaterra en Catar.
¿Y todas esas adolescentes cristianas crucificadas? ¿Y todas las personas que han sido decapitadas? ¿Y los niños quemados en jaulas hasta la muerte ?
Eso lo hizo ISIS. Es decir, el Banco de Inglaterra, el Lord Mayor, todos los matones de Westminster y Whitehall y sus amigos sarcásticos en DC, en busca de publicidad y apoyo para su invasión de Medio Oriente.
¿Y toda esta publicidad sobre que los Estados Unidos es “energéticamente independiente”? Siempre estuvimos en posición de ser energéticamente independientes. Todo lo que se necesitaba era que un grupo de cretinos en DC determinara (en concierto con sus hermanos en Londres, por supuesto) que era hora de revelar la inmensidad de las reservas de petróleo estadounidenses.
Ahora, ¿alguien realmente cree que Donald Trump o cualquier otro gerente de negocios involucrado en estos esquemas de largo alcance se va a trasladar y permitirá la distribución de dispositivos de energía gratuita en África o en cualquier otro lugar?
No. Todavía siguen el Plan Roosevelt, que se está implementando según lo previsto. Se está accediendo a las reservas petroleras estadounidenses. Mientras los judíos y los iraníes son culpados del continuo jaleo y descontento en el Medio Oriente que tiene al mundo de cabeza.
Los sionistas en Israel son conducidos por la nariz por Londres y Roma y, sin saberlo, apoyan su propia destrucción, pero ¿qué opción tienen? Israel fue creado por Londres y Roma, depende de Londres y Roma para su existencia, y no puedo imaginar que su destrucción por Londres y Roma ya esté en el horizonte. Israel es el chivo expiatorio en esta historia prediseñada.
A medida que el Papa y la Reina se retiran del Medio Oriente, y este deja de ser importante, Israel pierde su razón principal de ser —en su perspectiva. No importa el valor religioso que uno atribuya a la región; sin petróleo, su valor económico se reduce a las fechas y las aceitunas, y todo lo que el poder del cerebro pueda aportar.
De modo que los enemigos ocultos del cristianismo incrustados en la Iglesia de Roma pueden regocijarse con la destrucción de toda la Tierra Santa, y los británicos y “los Estados Unidos” tendrán que culpar a su chivo expiatorio, ya los árabes que han sido engañados en cuanto a quiénes son sus verdaderos enemigos, para poder contar con ellos para hacer el trabajo sucio.
Y así, todo el “show” se representa como un carnaval, que sale de la ciudad con las langostas desfilando hacia China.
El beneficio y el poder político es lo que estas personas en Londres y Roma adoran, y si tienen otros pensamientos o valores, es una noticia para nosotros. Se han deleitado absolutamente en vender a Estados Unidos como la “Tierra de los Libres” al tiempo que eliminan a todos los estadounidenses de la jurisdicción de la Tierra y los esclavizan con contratos comerciales falsos y falsas presunciones legales.
Cuando establecieron las Reglas Federales de Procedimiento Civil y ordenaron que los tribunales brindaran “una justicia aparente” no estaban bromeando sino diciendo la verdad. Solo una justicia aparente es proporcionada por los juristas contratados (el equivalente de mercenarios en el banco) como una cuestión de política pública.
No se tienen en cuenta los valores humanos o la decencia común en ninguno de estos esquemas calculados, ya que las corporaciones no son humanas y no les importa cuánto sufren las personas o cuántas mueren, siempre y cuando sus ganancias sean saludables.
Es por esto que cada vez más personas necesitan despertarse. Es solo una cuestión de tiempo hasta que las corporaciones planifiquen la desaparición de la raza humana y, a juzgar por sus acciones hasta el momento, parece que la institución responsable de limitar el poder de las corporaciones, la Curia Romana, no está haciendo su trabajo.
Sin duda habrá aullidos, gruñidos y crujidos de dientes cuando los culpables lean esto y se den cuenta de que han sido descubiertos. Pero se sabe desde hace mucho tiempo que la Verdad nos liberaría (a los esclavos) y acabaría con el poder del engaño. Y no debería sorprender a nadie que ese momento, finalmente, haya llegado.
Fuente:
Anna von Reitz — Wrong Again.
